La escasez de papel en Cuba ha provocado la reducción del número de páginas y la frecuencia con que se publicarán Granma y Juventud Rebelde, los diarios más importantes del país, una medida que también afecta a otros cuatro medios estatales.
“Debido a dificultades con la disponibilidad de papel gaceta en el país, las ediciones del periódico Granma de los miércoles y viernes, así como de los semanarios Granma Internacional, Trabajadores, Orbe y Opciones, se reducirán de 16 a ocho páginas”, indica un escueto comunicado oficial difundido este jueves.
La reestructuración comenzará a partir de este viernes y también incluirá la eliminación de la tirada de los sábados del periódico Juventud Rebelde, diario de la Unión de Jóvenes Comunistas, que mantendrá la circulación habitual de su edición dominical, la única que se publica en Cuba ese día.
“Otras publicaciones seriadas que se imprimen en papel gaceta verán afectada igualmente su circulación”, concluye la comunicación.
Granma, órgano del Partido Comunista donde se dan a conocer los grandes anuncios y las disposiciones del Gobierno en el país, perderá el espacio que dedicaba a grandes reportajes y entrevistas, generalmente dedicados a temas económicos y sociales.
Los viernes el diario más importante de la isla publicaba a dos páginas una sección llamada “Cartas”, utilizada por los lectores como tribuna para quejas y denuncias, que usualmente son respondidas por las instituciones y organismos estatales correspondientes.
El desabastecimiento de papel gaceta es el capítulo más reciente de la escasez crónica que sufre desde hace décadas la Isla, donde es cíclica la falta de alimentos básicos como el aceite, la leche y la harina de trigo, y de productos de higiene como el papel sanitario, el detergente y las frazadas de piso.
Durante la intensa crisis económica de principios de los años 90, conocida como “periodo especial”, la industria editorial cubana redujo sus publicaciones a mínimos.
En esos años muchos diarios desaparecieron y otros pasaron a tener circulación semanal.
Granma y Juventud Rebelde mantuvieron sus tiradas diarias pero redujeron el tamaño y el número de sus páginas.
La gradual recuperación del país en las últimas dos décadas ayudó relanzar muchas publicaciones y a retomar la edición de libros.
En 2016, Granma, fundado en 1965, estrenó un renovado diseño que incluyó modificaciones en su histórica cabecera y su formato, en busca de una apariencia “más moderna, más contemporánea y más limpia”.
Su contenido se toma como referencia para conocer la posición oficial de Cuba ante una temática.
Sin embargo, para la oposición de dentro y fuera de la isla, el periódico no es sino un órgano de propaganda gubernamental.
Frecuentemente los turistas que llegan a la isla lo adquieren como souvenir y sus ediciones históricas, como la del 26 de noviembre de 2016, donde se anunciaba la muerte de Fidel Castro, llegó a venderse a 3 y a 5 CUC, muy por encima de su valor inicial de 20 centavos de peso cubano.