El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) implementará un proyecto para la instalación de módulos solares fotovoltaicos en casas particulares en el centro de Cuba, para lo cual cuenta con un financiamiento de la Unión Europea.
El proyecto favorecerá a más de un centenar de viviendas en el municipio de Yaguajay, en la central provincia de Sancti Spíritus, y también incluye zonas de las provincias de Villa Clara, Ciego de Ávila y Camagüey.
Raydel Díaz, director de Inversiones de la Empresa Eléctrica Provincial de Sancti Spíritus, aseguró que el equipamiento está integrado por seis paneles y cuenta con una capacidad de 1 500 watts, de acuerdo con la agencia Prensa Latina (PL).
El proyecto del PNUD busca “ayudar a asentamientos afectados por el paso del devastador huracán Irma, en septiembre de 2017, y mejorar su adaptación al cambio climático“, aseguró Díaz.
Los módulos que se instalan emplean la energía de la luz solar y permitirán a las familias beneficiadas utilizar varios equipos eléctricos de uso doméstico, además de iluminar sus viviendas, destaca PL, que explica que en estos momentos el proyecto se encuentra en la fase de preparación de las viviendas y capacitación de quienes operarán con este sistema.
De acuerdo con cifras oficiales, de la electricidad generada por Cuba solo un 4 % proviene en la actualidad de fuentes renovables. La Isla, que produce únicamente el 40 % del petróleo que precisa, busca cambiar la matriz energética de cara al 2030 y espera cubrir con energías renovables el 24 % de toda la generación del país (alrededor de 2.300 megavatios).
Ese programa se basa fundamentalmente en la construcción de centrales bioeléctricas y parques solares y eólicos, aunque también incluye la instalación de calentadores solares y módulos solares fotovoltaicos, así como la sustitución de millones de bombillas tradicionales por luces LED, entre otras acciones.
Con ese plan, Cuba intenta reducir la dependencia energética del crudo subsidiado de Venezuela, un suministro que se ha debilitado considerablemente en los últimos dos años debido a la crisis económica en el país suramericano lo que ha obligado a la isla a buscar proveedores alternativos como Rusia y Argelia.