El banco francés Societe Generale S.A. pagará más de 1,340 millones de dólares al gobierno de EE.UU. por la violación de sanciones impuestas por Washington contra Cuba y otros países.
La multa deberá ser pagada a varias entidades oficiales estadounidenses, como parte de un acuerdo anunciado este lunes luego de un proceso judicial en la ciudad de Nueva York, y representa la segunda pena más grande impuesta a una institución financiera por violaciones de las leyes de Estados Unidos.
En una declaración emitida tras el acuerdo, el Societe Generale S.A. asegura que “la gran mayoría” de sus infracciones están relacionadas con Cuba y se derivan de una única facilidad de crédito renovable extendida en 2000, al tiempo que las transacciones restantes involucraron a otros países como Irán.
Société Générale has agreed to pay $1.3 billion for U.S. sanctions and money-laundering violations https://t.co/9BGRemkozJ
— The Wall Street Journal (@WSJ) November 19, 2018
Por su parte, la agencia EFE, citando a la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, refiere violaciones “intencionadas y conscientes” relacionadas con Cuba desde 2004 y hasta 2010, período en el cual el banco realizó transacciones por valor de 12.000 millones de dólares.
Por este motivo, Societe Generale –el tercer banco más grande de Francia– desembolsará un total de $1,340,165,000, cifra que incluye 53,9 millones a la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC); 717,2 millones a la Oficina del Fiscal Federal del Distrito Sur de Nueva York; 162,8 millones a la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Nueva York; 81,3 millones a la Reserva Federal y 325 millones al Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York.
Societe Generale se ha comprometido a pagar los primeros 162,8 millones de dólares en los próximos cinco días hábiles.
La Reserva Federal de EE.UU. dijo en un comunicado que la multa aplicada al banco francés se debía a prácticas “inseguras y defectuosas” en la aplicación de sus normativas contra Cuba, así como por carecer de “políticas y procedimientos suficientes para asegurar que las actividades llevadas a cabo en sus oficinas fuera de Estados Unidos” cumplan con las sanciones estadounidenses”.
De acuerdo con el comunicado, Societe Generale estará obligado a implementar un programa “para asegurar el cumplimiento global” de las medidas del Departamento del Tesoro y la OFAC, y no podrá realizar la recontratación de personas involucradas en “violaciones anteriores”, ni utilizarlos en calidad de contratistas o consultantes.
Por su parte, la OFAC aseguró que el banco procesó 796 transacciones que involucraban a Cuba del 11 de julio de 2007 al 26 de octubre de 2010, lo que consideró una violación del Reglamento de control de activos cubanos.
La oficina del fiscal de Nueva York aseguró que el acuerdo alcanzado persiguió “imponer un castigo sustancial” a la institución gala, y “enviar un fuerte mensaje de disuasión a otros bancos”, aunque dijo que había tenido en cuenta la cooperación “sustancial” del Societe Generale para reducir el castigo previsto inicialmente.
En respuesta a los señalamientos en su contra, el banco se comprometió en el acuerdo a “mejorar su programa de cumplimiento para prevenir y detectar posibles violaciones de las regulaciones de sanciones económicas de los EE. UU.” y mantener un consultor independiente “que evaluará los avances” en esta dirección.
Las multas al Societe Generale no son las primeras impuestas a instituciones bancarias por operaciones vinculadas con Cuba. Con anterioridad, el Credit Suisse fue multado con 536 millones de dólares en 2009, el BNP Paribas pagó una suma cercana a los 9,000 millones de dólares en 2014 y un año después el Credit Agricole acordó pagar 787 millones.
Según los cálculos de Cuba, los daños acumulados por las sanciones económicas estadounidenses contra la Isla entre abril de 2017 y marzo de 2018 superan los 4,321 millones de dólares, en tanto la cifra asciende a 933,578 millones desde el inicio del embargo hace más de cinco décadas.