“Regreso al futuro”
En realidad el título de una famosa película cubanoamericana.
Votantes cubanos en una era de descontento: ¿Qué esperar en noviembre?
La literatura sobre la participación política cubanoamericana destaca su compromiso político. Generalmente los cubanos se convierten en ciudadanos estadounidenses tan pronto como cumplen los requisitos necesarios y se convierten en votantes cubanoamericanos inmediatamente después. Y cuando se registran, votan. Masivamente.
Este no era el caso antes de finales de la década de 1970. Había ambivalencia en la población acerca de involucrarse en la dinámica política de este país, ya que la mayoría todavía tenía la esperanza de cortar el “próximo lechoncito de Navidades” en su tierra natal. El tiempo y la estrategia nacional del Partido Republicano para registrar latinos y otras minorías en estados predominantemente azules, así como los esfuerzos de la Fundación Nacional Cubano Americana para integrar a los cubanos en el sistema político estadounidense, dieron sus frutos en la década de 1980. El ataque del presidente Reagan al Imperio del Mal y su reclutamiento de cubanoamericanos como aliados en el ataque hemisférico contra el cambio revolucionario selló el trato con los cubanoamericanos y el Partido Republicano se convirtió en el partido del día para la mayoría de la comunidad. Por su parte, los republicanos invirtieron en candidatos cubanoamericanos, identificando buenos liderazgos, capacitándolos y apoyando sus campañas. El Partido Demócrata ha estado poniéndose al día desde entonces.
El compromiso político de nuestra muestra está a la altura de las expectativas. Solo la ola de migrantes que llegó durante los últimos siete años, muchos de los cuales no han estado en el país el tiempo necesario para convertirse en ciudadanos, se rezaga en la actividad de naturalización. (Gráfico 1)
El Partido Republicano sigue siendo el de elección de la mayoría de los cubanoamericanos, aunque el porcentaje de republicanos registrados se ha mantenido bastante estable desde que la presidencia de Obama hizo mella en el registro republicano. El Gráfico 2 muestra la tendencia en el registro antes y después de la administración Obama.
El Partido Republicano sigue estando bien representado entre todas las cohortes. Los recién llegados también se están apuntando. El Partido Demócrata presenta números anémicos en todos los ámbitos, excepto en el caso de los cubanoamericanos nacidos fuera de la isla. (Gráfico 3).
El Partido Demócrata ha avanzado poco dentro de la comunidad cubanoamericana en los últimos años, pero la categoría “Sin afiliación partidista” continúa atrayendo a cerca de un tercio de los votantes cubanoamericanos registrados. Y como muestra el Gráfico 4, la mayoría de los cubanoamericanos, registrados o no, se sienten más cercanos al Partido Republicano.
Quizás la medida más importante del compromiso político es la probabilidad de que los votantes registrados realmente voten en las próximas elecciones. El 85% de los votantes registrados están comprometidos a emitir su voto en noviembre y otro 11% informa que “probablemente” votará en las próximas elecciones. Los republicanos están algo más motivados que los demócratas o los independientes. Los votantes jóvenes son, como siempre, los más ambivalentes, pero esta es una valoración relativa ya que el 80% expresa certeza sobre la emisión de su voto y un 16% adicional lo ve como una probabilidad. (Gráfico 5).
Las carreras de caballos
Si la elección para Gobernador se realizara hoy con Ron De Santis y Charlie Crist como candidatos, ¿por quién votaría?:
DeSantis por “un burujón”
Las líneas de apuestas trazadas en Las Vegas y en otros lugares ven al gobernador Ron DeSantis como un gran favorito para ganar la reelección. Él es una “apuesta segura”. De 91 a 99.9% de certeza de reelección con una relación de apuestas de 1/10 en la mayoría de los escenarios. Este no es un cálculo difícil dado que Florida ahora tiene 5.2 millones más de republicanos registrados que demócratas. Aun así, los analistas observarán de cerca el “voto cubano” y sopesarán su importancia en las elecciones, ya que la mayoría de los cubanos viven en el condado de Miami-Dade, un condado que está muy cerca de romper décadas de tradición electoral al transformarse en un condado “púrpura” (republicano). Esta aparente transición está siendo impulsada por los cubanoamericanos y otros votantes latinos.
Nuestra encuesta completó sus entrevistas a mediados de septiembre. Si bien los números pueden cambiar, podemos arriesgarnos y afirmar que los cubanoamericanos van a votar en mayoría Ron DeSantis. Entre el 64% y el 70% de los cubanoamericanos votarán por el gobernador DeSantis. Habrá un pequeño número de desertores de las filas demócratas, pero los cubanoamericanos registrados como demócratas respaldarán la candidatura de su partido: Charlie Crist (suponiendo que los partidarios de Nikkie Fried no guarden rencor). A los demócratas también les irá bien entre los cubanoamericanos no nacidos en la isla, y entre los votantes más jóvenes. Pero incluso los recién llegados, que constantemente expresaron puntos de vista moderados sobre los temas planteados en nuestra encuesta, apoyan fuertemente a DeSantis en la medida en que la cohorte se divide entre los partidarios de DeSantis y los “indecisos”. Ningún encuestado en la cohorte más nueva expresó su deseo de votar por un demócrata. (Gráfico 6).
Las contiendas para el Congreso
Dado que gran parte de las entrevistas se realizaron antes de las primarias partidistas celebradas en agosto, es difícil estimar el comportamiento electoral proyectado de los votantes cubanoamericanos en las contiendas por el Congreso. Sin embargo, al contar las preferencias de nuestros encuestados, queda claro en el Gráfico 6 que la mayoría de los votantes cubanoamericanos planean votar por el candidato republicano en la boleta electoral. Este cuadro combina los compromisos de voto de los encuestados a lo largo de las tres contiendas para el Congreso (Distritos 26, 27 y 28). La gran cantidad de votantes indecisos albergan una esperanza efímera para el candidato demócrata, pero los votantes demócratas comprometidos son una minoría. (Gráfico 7).
Hay una contienda para el Congreso en la que se desafía en algo el dominio republicano. El Gráfico 8 muestra el desglose de las preferencias preprimarias de los votantes cubanoamericanos en el Distrito electoral 27. Aunque no es para ponerse nerviosos, el número relativamente alto de votos “No sé/Indecisos”, junto con los votantes demócratas comprometidos, hacen que esta sea la contienda más competitiva de todas para el Congreso de los votantes cubanoamericanos. (Gráfico 8).
Si las elecciones para Senador Estatal se realizaran hoy con Val Demmings y Marco Rubio como candidatos, ¿por quién votaría?
La contienda por el escaño en el Senado que actualmente ocupa el Senador Marco Rubio es más clara, como lo demuestra el pequeño número de votantes “indecisos”. Los dos contendientes son figuras políticas bien conocidas que han atraído la atención durante muchos meses. El 64% de los votantes cubanoamericanos reportan una clara preferencia por el senador Rubio. El número de votantes indecisos (10%) es bastante pequeño, dado que todos los encuestados registraron sus preferencias dos o tres meses antes de la elección. Sin embargo, dentro de las categorías de votantes, vemos algunas variaciones del patrón general de la comunidad.
Si combinamos el número de encuestados que expresaron su apoyo a la congresista Demings con el apoyo general a “la demócrata” en la contienda, podemos estimar la resistencia a la incumbencia del senador Rubio. El apoyo más fuerte a la representante Demings proviene de los votantes más jóvenes (27%), los nacidos fuera de Cuba (39%) y, por supuesto, los demócratas registrados (72%). Si bien nadie va a contar los votos hasta que toda Florida cante, está claro que la mayoría de los votantes cubanoamericanos actualmente están coreando el nombre de Marco Rubio. (Gráfico 9).
De cara a la contienda presidencial de 2024
¿Qué republicano le gustaría ver en la boleta electoral?
Cuando se les preguntó qué republicano les gustaría ver en la boleta electoral para presidente en 2024, está claro que el tren Trump todavía está recogiendo pasajeros por la calle 8. Al 37% de los encuestados les gustaría ver al expresidente Trump de nuevo en la boleta electoral. El 21% quiere reclutar a DeSantis. Un impresionante 59% de los republicanos registrados apoyan a Trump al igual que el 25% de los independientes (sin afiliación partidista). El gobernador DeSantis es un sólido segundo lugar en todas las cohortes. De hecho, se acerca a Trump en popularidad entre los votantes más jóvenes y lo supera entre los encuestados nacidos fuera de Cuba. Entre los demócratas, está empatado con Mike Pence como candidato preferido. La gran cantidad de respuestas “No sé” indica la incertidumbre del panorama electoral. (Gráfico 10)
El candidato demócrata preferido
Cuando se les pregunta qué candidato demócrata les gustaría ver en la boleta electoral para presidente en 2024, los cubanoamericanos presentan un verdadero caleidoscopio de posibilidades. El 10% de toda la muestra expresa preferencia por el presidente Biden. Atrae al 18% de los encuestados de 60 a 75 años, el 12% de los votantes nacidos fuera de Cuba, el 13% de los inmigrantes anteriores a 1995 y el 17% de los demócratas. La segmentación entre los demócratas cubanoamericanos podría reflejar la fragmentación dentro del partido. Barack Obama empata (estadísticamente) con el presidente Biden como candidato preferido entre los demócratas. La letra pequeña de la constitución, también conocida como la Vigésima Segunda Enmienda, hace que la designación de Obama para ser candidato sea una imposibilidad. Los votantes no nacidos en Cuba comparten este “entusiasmo” por el presidente Obama. (Gráfico 11).
Un detalle sobre una nueva fuente de “noticias”: ¿Cuánto influyen los “influencers”?
En los últimos años, el fenómeno internacional de los “influencers” se ha convertido en una fuerza sociopolítica evidente dentro del panorama virtual cubano y cubanoamericano. Usando plataformas como YouTube, Instagram y Tik Tok, las voces de estos jóvenes artistas expertos en tecnología a menudo transmiten mensajes políticos a su creciente audiencia. Preguntamos a nuestros encuestados desde dónde reciben su información sobre Cuba. Aproximadamente el 37% de toda la muestra mencionó que recibieron su información desde las redes sociales. Una clara diferenciación generacional y de olas migratorias se demuestra en el Gráfico 12. Mientras que solo el 4% de los encuestados de mayor edad informan haber recibido información sobre Cuba de fuentes de redes sociales, el 54% de los encuestados más jóvenes lo hacen. Cuarenta y siete por ciento de los recién llegados sintonizan las fuentes de las redes sociales para obtener información sobre Cuba, al igual que aquellos que aún no se han convertido en ciudadanos (46%). (Gráfico 12).
Les preguntamos a quienes informaron haber recibido información de fuentes de redes sociales si recibieron información sobre Cuba de alguna persona específica de Internet. Se mencionaron varios “influencers” (Otaola, Los Pichy Boys, Ultrack, otros). Luego preguntamos cuánta influencia tenían estas fuentes en su pensamiento político. El Gráfico 13 combina todas las respuestas sobre el uso de las redes sociales por la cantidad de influencia ejercida por personas específicas. Aproximadamente el 19% de la población total (no solo la audiencia de las redes sociales) informa que los “influencers” impactan en sus actitudes políticas de alguna manera. La importancia de estas personas en las redes sociales en el ámbito político aumenta entre los encuestados más jóvenes y las dos oleadas de recién llegados. Una cuarta parte de estas tres cohortes informan haber sido influenciadas políticamente por personas influyentes en las redes sociales. (Gráfico 13).
En resumen, vemos una comunidad fuertemente influenciada y leal al Partido Republicano.
A continuación: ¿Cómo llegamos aquí y pueden ocurrir cambios en el perfil político de los cubanoamericanos?