Redacción OnCuba
En la tarde de este viernes ocurrió el derrumbe de un tabique en el área de la chimenea de la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras, en Matanzas, la cual se encuentra detenida por mantenimiento.
Como consecuencia, cuatro trabajadores quedaron atrapados, de los que dos han sido rescatados vivos. Un tercero fue hallado sin vida al final de esta tarde, en tanto fuerzas especializadas trabajaban en el rescate del cuarto, según reportes desde el lugar del accidente.
Refiere TV Yurmurí que los hombres laboraban en la parte inferior de la chimenea, en la zona conocida por cenicero, donde extraían hollín y realizaban otros quehaceres de limpieza cuando sobre las 2:30 PM se derrumbó el tabique, una pared de siete metros de altura.
Los trabajadores accidentados pertenecen a la Empresa Especializada en Reparación y Mantenimiento a Chimeneas y trabajos en altura del Ministerio de la Construcción, agrega la información.
Según el periodista José Miguel Solís, al sitio del accidente acudieron las principales autoridades de Matanzas y el ministro cubano de Energía y Minas, Vicente de la O, junto a bomberos, rescatistas y personal médico.
Otros trabajadores que laboraban en la termoeléctrica también permanecían en el lugar, a la espera del rescate de su compañero, cuya búsqueda continuaba todavía en horas de la noche.
De acuerdo con TV Yurmurí los dos trabajadores rescatados vivos fueron llevados al Hospital Provincial Faustino Pérez, de Matanzas.
El primero presenta trauma craneal simple, luxación de cabeza y radio derecho, mientras que el segundo tiene una posible fractura de cadera y tibia derechas.
En declaraciones a TV Yumurí, el primer rescatado dijo sentirse listo para regresar a su casa, y narró la terrible experiencia vivida.
“Era como estar enterrado vivo. Todo fue tan rápido que ni siquiera lo puedo explicar”, aseguró. Además, contó que hubo un segundo desplome cuando intentaban sacar a los accidentados y que el casco lo salvó “porque fue lo único que quedó entre la pared y los ladrillos”.
El hombre, nombrado Ángel Pérez Montoya, explicó que antes de comenzar en los trabajos en la termoeléctrica Guiteras, un mes y medio atrás, se inspeccionó toda la zona para prevenir este tipo de incidentes.
“Al parecer, uno de los equipos de vibración que usamos hoy motivó el derrumbe”, estimó.
