La Unión Eléctrica (UNE) de Cuba prevé para el horario de mayor demanda de energía este martes otra jornada de apagones por fallos en varias centrales termoeléctricas, y la salida desde el domingo de la Central Termoeléctrica (CTE) Antonio Guiteras.
Los problemas de capacidad de generación han aumentado en los últimos días con respecto a las semanas previas; los apagones, sin embargo, han sido una constante desde hace más de un año, con especiales azotes a las provincias.
La UNE estima que habrá cortes en el suministro durante todo el día y calcula para la tarde-noche, el llamado horario pico, una disponibilidad de generación de 2353 megavatios (MW) y una demanda máxima de 3.050 MW.
Esto significa que el déficit será de 697 MW y la afectación alcanzará los 767 MW, según este ente dependiente del Ministerio de Energía y Minas.
La Guiteras, que no se arregla…
La Guiteras, ubicada en Matanzas, sufrió el domingo otra rotura en el área de calderas, situación que agudizó los apagones durante el horario de máxima demanda.
Es la segunda vez en menos de una semana que su caldera presenta desperfectos, provocando afectaciones en una jornada superiores a los 900 MW. Se espera que esté por lo menos tres días fuera de sistema.
El Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se encuentra en una precaria situación, con sistemas de generación y distribución obsoletos y un déficit crónico de mantenimientos e inversiones. A eso se suman los problemas financieros del país para adquirir combustible.
Son habituales los fallos y los paros en las siete centrales termoeléctricas, con una media de unos 40 años de funcionamiento, por encima de su vida programada.
Nueva rotura en la termoeléctrica Guiteras provocará más apagones en Cuba
El Gobierno cubano ha rentado en los últimos cinco años hasta siete centrales eléctricas flotantes a una empresa turca para compensar la caída de la capacidad de generación propia, una solución rápida, pero temporal, contaminante y costosa.
Los frecuentes cortes en el suministro eléctrico han sido también motivo de malestar social en el país y uno de los detonantes de las protestas de los últimos dos años, pues se combina con los efectos de la muy grave crisis económica que vive la isla, agudizada tras la pandemia de COVID-19 y el llamado Ordenamiento Monetario.
Efe/OnCuba.
Desastre anunciado no es noticia. Y lo peor está aún por venir. Mientras tanto, nuestro flamante presidente exige a otros la democratizacion de organismos internacionales.