La proliferación de los debates en torno a la diversidad sexual en Cuba es una realidad, afirmó en conferencia de prensa este lunes Mariela Castro, directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX). La institución, que lidera actualmente las acciones por el reconocimiento de los derechos de la comunidad LGBT en el país, aspira a que los adolescentes y jóvenes formen parte también de ese clima de discusión y para ello han anunciado algunas acciones concretas.
Entre las más inmediatas está la celebración, entre el 20 y el 21 de septiembre, del Día Mundial de la Salud Sexual, con actividades comunitarias en todo el país y la realización de un evento científico, una feria popular, la proyección y discusión de audiovisuales y un megaconcierto en La Habana.
Con ello el Centro que dirige la hija del presidente cubano Raúl Castro, persigue generar más espacios de intercambio con adolescentes y jóvenes, a los cuales, hasta ahora, no se les había dedicado especialmente ninguna acción tan abarcadora desde la perspectiva de la sexualidad.
Probablemente la realidad juvenil sea también tema de análisis en un simposio internacional que sesionará en noviembre en el CENESEX, enfocado en la prostitución, el turismo y el tráfico sexual, en el que está confirmada la intervención de investigadores de Argentina, Suecia y Bélgica.
Mariela Castro suele insistir en el necesario diálogo entre generaciones para progresar en el perfeccionamiento de la sociedad cubana. Con motivo de las jornadas de trabajo que se anuncian, la sexóloga recalcó que los adultos deben interesarse por saber qué están pensando los adolescentes y jóvenes en Cuba hoy y cuáles son sus necesidades.
“Se debe agudizar la capacidad de escuchar a los jóvenes y respetarlos”, expresó la especialista.
Este es, según dijo, uno de los pilares decisivos para avanzar en el establecimiento de políticas públicas que favorezcan la inclusión social y eviten situaciones discriminatorias.
La participación activa de la sociedad civil en iniciativas promovidas por el CENESEX, como las Jornadas contra la Homofobia que tienen lugar cada año en el mes de mayo, han contribuido a que instituciones del Estado y otras de carácter eminentemente político como el Partido Comunista, tomen cartas en este asunto.
Es por ello que ahora puede hablarse en Cuba de las modificaciones al Código de Familia, que muy pronto estará puesto a disposición de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento) para un nuevo análisis.
La institución capitaneada por Mariela Castro ha participado activamente en la revisión de este documento, que debe aprobar las uniones por consenso entre parejas homosexuales.
“Para defender derechos no es imprescindible aferrarse a la categoría `matrimonio´”, señaló la también Presidenta de la Comisión Nacional de Atención Integral a Personas Transexuales, al aclarar que por el momento este tema no será sometido a discusión entre los diputados.
Mariela Castro afirmó tener “mucha esperanza” en los resultados que pueden desprenderse del proyecto de modificación del Código, por la manera en que se están abordando las diferentes temáticas y por la cantidad de personas LGBT que se han ido empoderando poco a poco, que tendrán oportunidad de decidir sobre el asunto.
Asimismo, la directora del CENESEX comentó que otras instituciones como los ministerios de Educación, Cultura, Educación Superior y Salud Pública, han revisado o creado sus programas de trabajo sobre la salud y la diversidad sexual.
Este, sin embargo, no será un proceso corto. En el sistema de enseñanza cubana, por ejemplo, Mariela Castro reconoce grandes debilidades en cuanto a la capacitación del personal docente para orientar sin prejuicios.
“Hace falta -apuntó- aprender a educar aportando elementos de libertad y responsabilidad a las personas, y no hacerlo de manera moralista”.
Por: Daniela Grass
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