Las autoridades de Santiago de Cuba anunciaron la venta de carbón vegetal a la población, en momentos en que la isla atraviesa una severa crisis energética.
El nuevo gobernador santiaguero, Manuel Falcón Hernández, aseguró recientemente en una reunión gubernamental que “se adoptan medidas para la venta del carbón a la población como alternativa ante el déficit electroenergético y la situación del combustible”.
Así lo reflejó la televisora local en sus redes sociales, en un reporte del encuentro sostenido por Falcón con los delegados a la Asamblea Municipal de Santiago de Cuba, en el que también se abordaron otros temas como la entrega de la canasta básica y los casos de “cuadros febriles” asociados a un virus no identificado que se reportan en la provincia.
La información no ofrece más detalles sobre la venta de carbón a los santiagueros ante el incremento de los apagones, pero medios no oficiales y publicaciones en redes apuntan que esta se realizaría de manera racionada por la libreta de abastecimiento.
Incluso esas fuentes aseguran que ya la venta habría iniciado en algunos lugares del territorio oriental, y que se estaría comercializando una lata a 125 pesos cubanos (CUP).
OnCuba no ha podido obtener confirmación de este último dato, aunque vecinos de Santiago de Cuba dijeron a nuestro medio que, en efecto, autoridades y medios locales han informado sobre los preparativos para la venta del carbón de manera controlada.
Disminuye el déficit, pero sigue siendo alto
La noticia trasciende en medio de informaciones sobre nuevos problemas con la distribución y venta de gas licuado en la isla, y también en momentos en que el déficit de generación eléctrica muestra una leve disminución, según los partes oficiales.
Aunque ha bajado de los 1000 MW —cifra que se superó habitualmente en la última semana—, el déficit sigue siendo alto. Este martes la afectación máxima fue de 831 MW poco después del mediodía, y no en la noche, como es habitual.
Y para este miércoles, la máxima afectaciones estimadas son de 350 MW en el horario diurno y de 650 MW en la noche, según las previsiones de la Unión Eléctrica (UNE).
De acuerdo con la entidad, han disminuido las roturas de las plantas generadoras y en estos momentos solo están fuera del sistema por averías la unidad 2 de la termoeléctrica de Felton, en Holguín, y la unidad 5 de la termoeléctrica de Renté, en Santiago de Cuba.
Además, las unidades 1 y 3 de la termoeléctrica de Santa Cruz del Norte y la unidad 1 de la de Felton están en labores de mantenimiento.
La UNE avisa que las limitaciones en la generación térmica son de 435 MW, mientras que 45 centrales de generación distribuida están fuera de servicio por falta de combustible. Ello representa una afectación de 319 MW.
Cuba padece desde hace varios años de una situación crónica con la generación eléctrica, provocada por la antigüedad de las plantas generadoras y la crisis económica de la isla, que afecta las inversiones y los mantenimientos necesarios para las mismas.
A este contexto se une el déficit de combustible que padece el país, azuzado por la falta de divisas y las sanciones estadounidenses.
Todo ello se traduce en apagones que afectan a la golpeada economía cubana y provocan las críticas y el descontento de la población, que ha vuelto a manifestarse públicamente por este y otros temas, como ocurrió en Santiago de Cuba, Bayamo y otras localidades el pasado marzo.