Mariana Anllo creció entre las canciones de pueblos perdidos en la Asturia más profunda de España. Los sonidos de una Europa rural desembarcaron en Cuba junto a los abuelos de Mariana, y décadas después aún sobreviven en las calles habaneras. La música de gaitas, muñeiras, jotas se extienden hoy por la ciudad como el eco de un olvido.
Bella mary besitos de tu primis yadi