Elaine Vilar Madruga: “He aprendido a construir otra Cuba dentro de mí misma”

La escritora Elaine Vilar Madruga ha declarado que “ojalá” todos sus libros se pudieran publicar en Cuba, dado que no todos están en las estanterías de la isla, aunque se ha mostrado esperanzada en que algún día este hecho pueda suceder.

Vilas Madruga, natural de La Habana, donde tiene su residencia, ha presentado en el Festival de Fantasía, Ciencia Ficción y Terror Celsius 232 de Avilés su obra La tiranía de las moscas, uno de sus trabajos no editados en la isla.

La extraordinaria voz y obra de la cubana Elaine Vilar Madruga llenaron la Carpa de Actividades del #celsius2024 durante el encuentro con la autora pic.twitter.com/H5yZeSTtSi

— Celsius 232 (@festivalcelsius) July 18, 2024

Según ha definido en entrevista para Efe, se trata de una comedia negra que cuenta la historia de Casandra, Caleb y Calia, tres hermanos a cada cual más insólitos.

Casandra, la mayor, siente atracción sexual por los objetos, concretamente por un puente que está cerca de su casa, ha explicado la autora.

Su padre, un militar tartamudo, cae en desgracia del Abuelo Bigotes, líder del país y, por la frustración que esto le provoca, hace la vida imposible a sus hijos, especialmente a Casandra, a quien le impide ir a ver el puente del que está enamorada.

En esta novela recrea los conflictos políticos contenidos, “comprimidos a presión”, en el hogar de la familia protagonista.

En el proceso de creación de los personajes, Vilar Madruga siempre inicia una investigación de fondo y, en este caso, la autora ha estudiado la figura de los dictadores en los contextos de Latinoamérica, Europa, Asia y África.

Con esas premisas, ha ido construyendo una historia “kafkiana, mágica y maravillosa, y también de opresión, de claustrofobia y de terror”, mezclado, un poco, con la parodia, porque Vila Madruga se ha mostrado convencida del “poder revolucionario” del humor.

Por eso, La tiranía de las moscas permite poner en solfa “lo ridículo de la dictadura, en sus uniformes, en su manera de comportarse, en la apariencia física del tirano, su gesticulación y su proyección escénica”.

Vilar Madruga tiene su segunda casa en Toronto, aunque vive en La Habana con su familia, donde escribe historias que se publican en países como Estados Unidos, Canadá, República Dominicana, España, Chile, Francia, Italia o México, pero no todas en Cuba.

“Cuba no es una democracia”, pero, como ha indicado la autora, “uno se construye la democracia dentro de casa”, puesto que “el espacio esencial de la democracia es la cabeza de uno, el cerebro del creador, que es donde se construyen los espacios de libertad y de pensamiento”.

“He aprendido a construir esa otra Cuba dentro de mí misma”, ha declarado Vila Madruga, sabedora de que hay libros que escribe que no se publicarían en su país, como La tiranía de las moscas, aunque se consuela con el hecho de que la isla “es sólo un pedazo del mundo” y que, por lo tanto, “existe más mundo”.

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“Yo escribo lo que me gusta en primera instancia y trato de que en mi mente no haya mucha autocensura, que es algo diferente a la censura”, ha declarado la escritora que empezó con siete años a escribir su primera novela, convencida de que esa sería su vida, y que ya lleva cincuenta libros publicados, gran parte de ellos en su país.

Con 35 años, Vilar Madruga es licenciada en Arte Teatral por el Instituto Superior de Arte de Cuba y también tiene formación musical.

“Cuando vienes del teatro, te das cuenta de que las artes son muchas, pero se combinan en una, y me encantaría escribir un guion, porque creo que el sueño de los escritores es algún día llegar al cine. No lo voy a negar, ojalá”, dijo.

Efe/OnCuba.