En uno de los conciertos más esperados del Cubadisco-2014, la banda española Chambao interpretará dos canciones de Carlos Varela, y el mítico Gnomo cantará dos temas del célebre grupo malagueños.
A María del Mar Rodríguez, más conocida como LaMari, le avergüenza decir que Varela colaborará con Chambao, porque es su grupo el que se siente honrado de compartir escenario con este poeta urbano.
Por lo pronto, adelantó que cantará de Varela su emotiva Habáname y Bendita lluvia, un tema que consideró “alegre”, aunque nos cueste asociar ese término a la obra del autor de Guillermo Tell.
Además, Chambao será acompañada en su concierto del Karl Marx por el legendario tresero cubano Pancho Amat, una sorpresa y un placer para LaMari, quien ama dicho instrumento gracias al cubano Oliver Sierra.
Se trata de un músico habitual en sus discos y conciertos, que tocó el tres en el tema Roé por la escalera, del disco Pokito a poko (2005), una suerte de tributo al grupo español Tobletón.
La cantante relató a OnCuba que esa canción es protagonizada por el tres, y un músico argentino imita el “cantao” cubano al hablar, una coña que nació durante la grabación, y que les funcionó.
Sierra, que también toca la guitarra flamenca y el bajo con Chambao, aporta el sabor cubano que tanto disfruta LaMari, un enamoramiento que sintió antes de entender, y que la hacía querer venir hace años.
“Siempre quisimos venir, pero tenía que ser en el momento preciso, y ese momento es ahora: es el mejor momento para Chambao y para Cuba”, afirmó LaMari, que recibió aquí un Premio Internacional Cubadisco.
Para celebrar su visita, y conectar con un público culturalmente muy parecido al andaluz, prometió dos horas de buena y variada música, “un paseíto por nuestra trayectoria”.
No descartó futuras colaboraciones discográficas con músicos cubanos como ya hizo con el gran Chucho Valdés, su vecino en Málaga y quien abrió para ellos el disco Chambao con la canción Al aire.
“Lo que tenga que llegar que llegue, la música cubana no entra con un viaje, si te dedicas a la música está ahí hace rato, en todas partes… Aquí hay muchos músicos que uno quisiera quedarse a su lado empapándote como una esponja. Hay grandes estandartes, como Van Van, pero hay muchos que sencillamente te atrapan”, aseguró.
Todo sonrisas, no le gusta empero que la encasillen con el flamenco, aunque como buena malagueña lo respete y lo sienta profundamente, pero se reconoce de otra generación con otros intereses.
Por eso quizás lo mejor es seguir su consejo, olvidarse de etiquetas y disfrutar a plenitud lo que hace. Al menos ya ella empezó a divertirse en los ensayos en el estudio Abdala…