Yelanys Hernández Fusté
Reconocidas agrupaciones se reunirán por tres días en el Salón Rosado de La Tropical para iniciar las actividades por el aniversario 45 de la orquesta. La iniciativa, organizada por la agencia de representación Clave Cubana, tendrá lugar entre el 13, 14 y 15 de diciembre…
Aun recuerdo a mi abuela Juana Teodora pidiéndome silencio frente a nuestro KRIM 218, para poder mover sus nonagenarios pies al compás de las notas de Pedrito, «El Calvo», como solía distinguir a ese intérprete.
Van Van irrumpía en su rutina cual si fuera una sacudida huracanada. A mi abuela también le encantaban las combinaciones de Pupy (César Pedroso) en el piano, a Changuito en las pailas y, por supuesto, que Pedrito cantara: “Que no me toquen la puerta, que el negro está cocinando”.
Van Van la llevaba al delirio, a pesar de que la Aragón, Arcaño y sus Maravillas y la Sonora Matancera “le sobrecogían el corazón”.
Recordaba Juana Teodora aquel suceso que irrumpió a finales de 1969. Sabía de las andanzas de Formell con la Revé, del cual el tema El martes constituía una especie de himno melódico para ella y mi abuelo Severiano. También tarareaba Lo material, y disfrutaba de una Elena Burke inmensa, que interpretaba como nadie aquellas piezas del afamado bajista y autor cubano.
Es que para ella no había nadie mejor que le alegrara el día que ese Van Van de Se permuta, Marilú, Se muere de sed la tía y los temas de la película Los pájaros tirándole a la escopeta.
Aunque no pocos echan de menos esa época de la orquesta, hay otros que gustan de la “agresividad” de Chapeando, Van Van is here (Llegó Van Van), Arrasando y La maquinaria, ese último disco que actualmente disfrutamos.
Válidos han sido los 44 años que hoy celebra la orquesta que surgió al calor de una frase imprescindible en una etapa crucial de la Isla.
Sin dudas, Formell ha sintetizado historias nuestras en los minutos musicales que compone. Su finura lleva el sabor y el estilo heredado de Ñico Saquito, Benny Moré, Miguelito Cuní y Arsenio Rodríguez. Es meticuloso, preocupado por mantener un sello y no se deja llevar por el mal gusto.
El secreto o la fórmula de Van Van, según enunció hace unos días Formell, está en la historia de muchos músicos cubanos. “Creo que fuimos los primeros en hacer fusión con lo que nos rodea del Caribe y de Estados Unidos, con el rhythm and blues de New Orleans y el trabajo con las voces…
“No nos hemos detenido hasta la fecha. Esta ha sido la primicia de Van Van. Estamos en el gusto del bailador, del que sigue esta música y le damos aportes nuevos. De una forma u otra el público lo ha recibido, lo ha hecho suyo”, aseguró el músico, a la vez que adelantó un posible concierto en París, auspiciado por el prestigioso Centro de Arte de la capital francesa.
Antes, en este mismo mes, reconocidas agrupaciones se reunirán por tres días en el Salón Rosado de La Tropical para iniciar las actividades por el aniversario 45 de la orquesta. La iniciativa, organizada por la agencia de representación Clave Cubana, tendrá lugar entre el 13, 14 y 15 de diciembre, y en ella participarán Paulito FG, Anacaona, NG La Banda, Pupy y los que son son, Pachito Alonso y sus Kini Kini, Manolito Simonet y su Trabuco, y Laritza Bacallao, entre otros. El gran cierre de estas celebraciones acontecerá en ese emblemático recinto habanero con Van Van, este 14 de diciembre.
Con las noticias frescas aún de los premios obtenidos por Juan Formell —el Grammy Latino a la excelencia Musical y el Womex 2013—, los cubanos nos congratulamos de contar con una agrupación que no pierde la capacidad de sorprendernos, de ayudarnos a continuar este viaje por la cubanía en sus zonas más arraigadas, de ser un eterno cronómetro de nuestra realidad, sin olvidar la poesía que hay en las cotidianidades.
