Este domingo 29 de julio comienza el deporte rey en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018. El atletismo es uno de los platos fuertes en los eventos multideportivos, tanto por la cantidad de medallas que reparte como por las emociones que despierta en atletas y aficionados, y esta vez no debe ser la excepción.
Para Cuba, que terminada la mitad de los Juegos ha visto cómo México se escapa en la cima del medallero, el botín del atletismo se antoja fundamental para escalar en la tabla, aunque será difícil que pueda repetir la actuación de Veracruz 2014, cuando la cifra de títulos se elevó hasta 23.
Ahora, con un equipo que mezcla veteranos con novatos –algunos ciertamente de grandes potencialidades, pero novatos al fin y al cabo– los pronósticos son más conservadores y apuntan a unas 15 coronas, que deben ser suficientes para ganar por países este deporte. En la delegación se incluyen las principales figuras de la Isla en estos momentos y también varios de los reyes hace cuatro años.
Entre los primeros se roba los reflectores el saltador de longitud Juan Miguel Echevarría, una de las sensaciones de la actual temporada atlética a nivel nundial. Con solo 19 años, el camagüeyano ha tenido un 2018 de ensueño, en el que logró el título universal bajo techo y mejoró sus marcas hasta los 8,66 metros (m) en Ostrava, República Checa.
Además, clavó los pinchos a 8,83 m en la sexta parada de la Liga del Diamante, en Estocolmo, Suecia, aunque el registro no fue homologado porque el viento a favor (+2,1) superaba levemente el límite legal (2,0). En Barranquilla competirá el próximo 31 de agosto y su triunfo parece tan seguro que apenas sería noticia.
Otra estelar será la pertiguista Yarisley Silva, campeona en Veracruz y con una hoja de servicios que incluye títulos mundiales bajo techo y al aire libre y el subcampeonato olímpico en Londres 2012. A sus 31 años es una atleta madura, competitiva, y con progresión en la actual temporada.
Hace solo unos días, el 20 de julio, Silva logró su mejor salto del año en Mónaco, con un excelente 4,80. No obstante, no podrá descuidarse porque este propio domingo en Barranquilla se encontrará con la venezolana Robeilys Peinado, una joven de solo 20 años con la que compartió la medalla de bronce en el campeonato mundial de Londres 2017 y que es una de las principales cartas de triunfo de la nación sudamericana.
Discos de oro
Más despejado parece el camino de Denia Caballero y Yaimé Pérez en el disco para damas. Para ambas solo ha habido una rival de peso este año, la fuera de serie croata Sandra Perkovic, y ella, claro está, no concursará en el torneo regional.
El currículo de Denia es ciertamente más impresionante, gracias a su título del orbe en Beijing 2015 y el bronce olímpico en Río 2016. Además, ganó los Centrocaribeños de 2014 y los Panamericanos de Toronto 2015. Pero hoy por hoy la mejor discóbola de Cuba es Yaimé Pérez, quien ha pasado varias veces sobre los 66 m –su mejor marca del año es 67,82–, mientras Caballero solo ha podido lograrlo una vez: 66,09.
Ambas parecen predestinadas a hacer el 1-2. Solo faltaría por ver cuál de las dos se cuelga el oro el próximo martes.
También debe encumbrarse Yorgelis Rodríguez en el heptalón, que finalizará el 1ro de agosto. La joven guantanamera es una de las mejores del mundo en la actualidad y este año ganó bronce en el Mundial bajo techo y rompió el récord cubano, que estaba en su poder, con 6,742 puntos en el mitin de pruebas combinadas de Götzis, Austria.
Por demás, Yorgelis también está inscrita en el salto de altura, una de sus especialidades más fuertes, en la que podría retar el jueves 2 de agosto a la actual monarca centrocaribeña, Levern Spencer, de Santa Lucía.
Otras figuras con posibilidades son los campeones de Veracruz Roberto Janet, en el martillo masculino; Jorge Fernández, en el disco; y Lázaro Borges, en la pértiga; así como los relevos, en especial el largo; el siempre competitivo Leonel Suárez, en el decatlón; y los jóvenes pero muy talentosos triplistas Cristian Nápoles, cuarto en el pasado Mundial de mayores; y Jordan Díaz, quien hace apenas unos días logró el título del orbe en la categoría juvenil.
Entre las mujeres, repite la campeona centroamericana Rose Mary Almanza –que no ha tenido una temporada brillante y no ha logrado bajar de los 2:00 minutos–, al tiempo que Yaniuvis López tratará de mejorar la plata lograda en Veracruz y la todavía juvenil Roxana Gómez intentará imponer su fuerza en la vuelta al óvalo y liderar al renovado equipo del 4×400.
No solo Cuba
Fuera de la delegación cubana, en el atletismo en Barranquilla también tendrán protagonismo otras conocidas figuras del deporte rey a nivel mundial. Por el país sede se distinguen dos ases planetarios: la triplista Caterine Ibargüen y el marchista Éider Arévalo.
Ibargüen es la actual campeona olímpica del triple salto, prueba en la que competirá el próximo miércoles y en la que tiene, además, la mejor marca del año con 14,96. Su camino al título parece despejado pues su gran rival en el área y el mundo, la venezolana Yulimar Rojas –campeona del mundo en Londres 2017–, se perderá los Juegos por una lesión.
Ante la ausencia de Rojas, Ibargüen, incluso, va por más pues probará suerte el lunes en el salto de longitud.
En cuanto a Arévalo, el abanderado de Colombia en los Juegos, tratará de refrendar su favoristo en los 20 kilómetros de la marcha aupado por la afición y el aval de su cetro del orbe. Sin embargo, no podrá descuidarse de los siempre peligrosos marchistas mexicanos y del guatemalteco Erick Barrondo, actual rey centroamericano y plata olímpica en Londres 2012.
En la velocidad destaca el jamaicano Nesta Carter, un veterano de 32 años que recientemente perdió por dopaje el título del relevo corto en Beijing 2008. No obstante, sigue siendo un velocista de clase mundial y debe plantar cara en el hectómetro y liderar la posta rápida de su país.
La pelea, sin embargo, se pinta disputada, pues también estará el panameño Alonso Edward, quien ya sabe lo que es ganar en la Liga de Diamante y logró la plata en el campeonato de Berlín 2009 en los 200, una distancia en la que este año tiene una marca de 19,90. Edward ya fue campeón en los 100 m en los Sudamericanos de Cochabamba 2018, donce hizo 10,01, un registro mejor que el que tiene Carter en esta temporada (10,19).
En los 400 lisos, el dominicano Luguelín Santos es la principal figura. Plata en Londres 2012, campeón panamericano en Toronto 2015 y bronce en el mundial de Moscú 2013, este año tiene una marca 44,66 segundos que lo sitúa como favorito, aunque el costarricense Nery Brenes, el jamaicano Rusheen McDonald, y el trinitario Deon Lendore podrían hacerle sombra.
Otros nombres que tampoco pueden perderse de vista son los de la marchista mexicana Guadalupe González, subcampeona olímpica de Río 2016; el fondista azteca Juan Luis Barrios, ganador de los 5,000 y los 10,000 metros en Veracruz; la puertorriqueña Jasmine Camacho-Quinn, que a sus 21 años tiene unos fabulosos 12,40 segundos en los 100 metros con vallas –lo mejor de este año–; y el también boricua Ryan Sánchez, número uno en el escalafón juvenil de 800 metros.
El deporte como manifestacion del desarrollo socio-cultural de la nacion refleja en Cuba el mismo reroceso y deterioro del sistema y en nuestro caso de la voluntad gubernamental, con todo lo que tenemos ya no es una prioridad como antaño, poco a poco iremos cogiendo el nivel que nos corresponde de una isla de 10 millones llena de problemas
El socialismo en su estado puro, sin dinero de los demás, pues fracasa todo y el deporte no es una excepción, estamos ahora mismo discutiendo el segundo lugar con Colombia, increíble en otros tiempos.