El cubano Juan Miguel Echevarría no defraudó y se alzó con el triunfo este domingo en la final de longitud de la reunión de Rabat, sexta parada de la Liga de Diamante, con una marca de 8,34 metros.
El saltador caribeño superó al vigente campeón mundial, el sudafricano Luvo Manyonga, segundo con un mejor intento de 8,21, y el estadounidense Jeff Henderson, oro en los Juegos de Río, que no pudo pasar a la mejora, tras saltar unos decepcionantes 6,10.
Todo un toque de atención para los rivales de Echevarría, que, pese a seguir todavía muy lejos del estado de forma que le llevó el pasado año a firmar unos espectaculares 8,83 ventosos, sigue dando pasos hacia adelante en su puesta a punto.
De hecho, el antillano, que cumplirá 21 años el próximo mes de agosto, mejoró en veintidós centímetros los 8,12 que firmó hace dos semanas en Estocolmo en una reunión marcada por el viento y la lluvia.
Juan Miguel Echevarría, que este año ha llegado hasta los 8,92 metros, con un auténtico vendaval -+3.3 m/s-, se dejó bastantes centímetros en la tabla.
Un dato que sigue alimentando las esperanzas de que el cubano pueda volver a poner en riesgo, como ya hizo el curso pasado, el legendario récord del mundo -8.95- de Mike Powell.
Por qué no en los Mundiales que se disputarán el próximo mes de septiembre, la cita en la que quiere volver a brillar tras dos años de calvario André de Grasse.
El velocista canadiense, plata en los Juegos Olímpicos de Río, demostró este domingo con su triunfo en la final de los 200 metros que parece haber superado definitivamente las lesiones que le dejaron en blanco las dos últimas temporadas.
Un triunfo de prestigio en el que De Grasse tuvo que superar nada más y nada menos que al vigente campeón mundial, el turco Ramil Guliyev, que no pudo resistir el acelerón final del canadiense, que se alzó con la victoria con un tiempo de 20.19.
Esa marca todavía está muy lejos de los 19,70 que firmó la pasada semana el estadounidense Michael Norman en Roma, pero vuelve a situar a De Grasse entre los candidatos a las medallas en Doha.
En la cita mundialista, salvo sorpresa,se volverá a repetir el duelo que protagonizaron este domingo en los 1.500 la etíope Genzebe Dibaba y la holandesa Sifan Hasan.
Ganó la etíope, plusmarquista mundial, que se impuso con un tiempo de 3:55.47, la mejor marca mundial del año, tras resistir el ataque final de Hasan, que se tuvo que conformar con la segunda plaza con 3:55.93.
Otra mejor marca mundial del año la consiguió el también etíope Getnet Wale, que se alzó con la victoria en los 3.000 obstáculos con un crono de 8:06.21.
Mucho más discreta fue la marca de la keniana Nelly Jepkosgei, que se impuso con un tiempo de 1:59.50 en los 800 metros, una prueba en la que finalmente no compitió la sudafricana Caster Semenya tras unos días previos marcados por la legalidad o no se su presencia.
Quien sí estuvo en Rabat fue la bareiní Salwa Naser, que firmó su tercer triunfo consecutivo en los 400 metros en la presente edición de la Liga de Diamante con un tiempo de 50.13, su mejor registro de la temporada.
También firmó su mejor marca de la temporada el ruso Sergey Shubenkov, que se impuso en la final de los 110 vallas con un tiempo de 13.12.