Javier Sotomayor es una leyenda del atletismo mundial. El 27 de julio de 1993 estableció en Salamanca, con 2,45 metros, la plusmarca mundial de salto de altura que 31 años después sigue en su poder.
En su opinión, otro saltador, en este caso de triple, y español pero de origen cubano, Jordan Díaz, tiene “mucho margen de crecimiento y la capacidad de hacer un récord del mundo”.
Sotomayor (Matanzas, Cuba; 1967) posee un palmarés inigualable que incluye dos medallas de oro en los Mundiales al aire libre de Stuttgart’93 y Atenas’97 y cuatro en los de pista cubierta de Budapest’89, Toronto’93, Barcelona’95 y Maebashi’99.
Además, un oro olímpico en Barcelona’92 y una plata en Sydney 2000, y tres triunfos en los Juegos Panamericanos de Indianapolis’87, La Habana’91 y Mar del Plata’95.
En la actualidad, el exatleta, embajador de los II Juegos Inclusivos en Madrid de la Fundación Sanitas, sigue vinculado al deporte. Reparte su tiempo entre Cuba y España, país en el que está muy vinculado a la ciudad de Guadalajara, que recientemente le homenajeó por el trigésimo aniversario de su récord.
P: Fue campeón del mundo, oro olímpico, triple campeón de los Panamericanos. Su palmarés asusta.
S: Creo que disfruté el tiempo que estuve como atleta. Tuve bastantes éxitos, hice algunos que otros récords y gané alguna que otra medalla. Estoy contento con el palmarés y con las cosas que conseguí aunque algunas platas que logré me hubieran gustado que fuera oro.
P: 31 años después sus 2,45 metros siguen sin superarse.
S: Son 31 años de los 2,45 pero 36 como plusmarquista mundial porque mi primer récord es de 1988 y esa marca todavía no ha sido superada. Cuando hice esos 2,45 nunca pensé que podría tener el honor de despertarme tanto tiempo después y mantenerlo.
P: El catarí Mutaz Essa Barshim ha estado cerca de superarlo
S: Barshim y Bohdan Bondarenko. Los dos tenían condiciones y estuvieron muy cercanos. Me impresionó mucho la forma en que lo estaban haciendo.
Ya Bondarenko está totalmente alejado de las pistas. Hizo un salto este año pero no bueno y Barshim todavía se mantiene en la élite mundial aunque el tiempo pasa para todos.
P: ¿Sigue viviendo entre La Habana y Guadalajara?
S: Llegué de La Habana hace dos días y mañana me voy a Guadalajara. Estaré un tiempo con mis hijos y regreso a La Habana. Y así estoy sucesivamente.
P: Hace poco Ana Peleteiro anunció su marcha a Galicia para entrenar con su marido, Benjamin Compaoré, y dejaba el grupo de trabajo de Iván Pedroso. ¿Cómo vio ese movimiento?
S: No puedo juzgarlo. Con toda seguridad su entorno familiar va a ser favorable pero no creo que sea muy positivo. Cada persona piensa a su manera y no a todo el mundo le va igual. Algunos triunfan y otros no.
En mi caso lo tenía claro. Si tenía éxito con un entrenador trataba de mantenerlo.
Iván, aparte de haber sido un gran atleta, es un gran entrenador y creo que lo que más admiro es cómo sabe transmitirle a sus atletas lo que quiere que hagan. Les da esa confianza y esa motivación para sacarles el máximo.
P: Para los españoles una de las grandes noticias del año ha sido la irrupción de Jordan Díaz. ¿Qué potencial tiene?
S: Este chico tiene mucho margen de crecimiento y de mejora, no por lo joven que es sino por el talento que tiene.
Ya de júnior se veían sus cualidades con las marcas que hacía. Hoy en día, saltando por encima de los 18 metros, creo que es de los mejores y el que tiene la opción y la capacidad de hacer un récord del mundo.
Cubano Jordan Díaz nominado al premio de Mejor Atleta Europeo de 2024
P: De lo que no hay duda es de que el talento cubano sigue existiendo.
S: Sí, lo único de lo que nos lamentamos es que las medallas de los Juegos Olímpicos no hayan sido para Cuba aunque sean tres cubanos (Jordan Díaz, Pedro Pichardo y Andy Díaz) los tres medallistas en los Juegos de París y dos de ellos entrenados por cubanos.
P: ¿Cómo está su hijo Jaxier, sigue practicando atletismo?
S: De momento todavía le falta un largo camino por recorrer. Tiene solamente 16 años y es muy temprano para decir si va a llegar muy alto o no. Lo importante es que se siga superando.
P: Al hablar de Javier Sotomayor una palabra que se viene a la mente es leyenda. ¿Se siente así?
S: Me siento una leyenda. No el mejor, para nada, pero sí que por las cosas que hice, las medallas y los récords, estoy entre ellos.
David Ramiro / EFE.
Saludos, Javier Sotomayor, de las pocas personas públicas de prestigio en Cuba y el mundo. Su opinión deportiva tiene peso, pero hablar de un traidor es otra cosa. La persona que se hizo profesional aquí, deserta con otra bandera y realiza las declaraciones que no ” quieren publicar en Cuba es aborrecible””. José Martí escribió sobre seres de este tipo. Cómo están las cosas en el mundo lo tendremos aquí compitiendo por el país que le acogió y está promocionando.
No siempre el actuar personal es una equivocación unipersonal, existen hechos y acciones que limitan el porvenir y bienestar.
Un atleta, artista, escritor o científico, debe buscar soluciones y perpectivas para desarrollarse, eso en Cuba es muy difícil, te exigen actuar como instrumento para beneficio de la Élite Gobernante, al retirarse no hay compensación de Vida.
Eso que dices, es muy parecido o más bien una Mala Copia de lo que dicen “los medios” sobre el deporte y sus deportistas en mi país (Cuba). Hay buenos deportistas y se le buscan mejores condiciones para su mejor rendimiento pero hay “otros” ¿inconformes? Que no es suficiente para ello competir a nombre de su país y se “pasan” a otros países, que por supuesto No todo es color de rosa. Hay que sacrificar mucho para renunciar a Cuba y eso, muchos lo saben y lo callan.