Dos swines, dos pelotas volando y primera victoria de los Cocodrilos de Matanzas en la final de la 59 Serie Nacional de Béisbol.
Suena sencillo, pero los yumurinos tuvieron que trabajar mucho para salir delante en el cotejo frente a los agresivos e inspirados Toros de Camagüey, que nuevamente contaron con el inestimable apoyo de su fiel y feroz fanaticada.
Javier Camero fue el encargado de aupar a los Cocodrilos y desatar la furia roja, mientras Freddy Asiel Álvarez, Jonder Martínez y Yamichel Pérez se combinaron desde la lomita para controlar las embestidas taurinas. OnCuba repasa los detalles más importantes del partido.
Lo mejor
Matanzas supo jugar a remolque sin perder la cabeza y sin desesperarse cuando los Toros estaba delante en el marcador. Los Cocodrilos dejaron escapar innumerables ocasiones de anotar y tres veces vieron como quedaban las bases llenas.
Tranquilamente aguardaron por una conexión de quiebre, que llegó en el tercio conclusivo del duelo. Hasta ese momento fue vital el trabajo de los lanzadores yumurinos, quienes, si bien permitieron tres carreras, no dejaron que la pizarra se abriera.
Lo peor
La pobre oportunidad con hombres en circulación de los dos equipos marcaron los destinos del partido. Un total de 25 corredores quedaron flotando en las almohadillas, de ellos 16 en posición anotadora.
Entre los dos conjuntos dejaron cinco veces las bases llenas y encontraron la manera de lograr acciones positivas para remolcar. La situación le pasó factura a los agramontinos, quienes no supieron aprovechar los 16 hombres que colocaron en circulación por distintas vías.
Las claves
Erisbel Arruebarrena cometió un error que le costó una carrera a los Cocodrilos, pero en sentido general la defensa yumurina demostró que su liderazgo en el campeonato no fue obra de la casualidad.
Dos jugadas de doble play cruciales contra batazos de Santiago Torres y Leslie Anderson dieron vida a los matanceros, que contaron con muy buen trabajo detrás del plato de Ariel Martínez. El máscara no se vio tan precipitado como en la semifinal con Las Tunas y condujo muy bien a sus lanzadores.
El héroe
Javier Camero se robó los focos. En su primer turno le botó la pelota a Lázaro Blanco, y en el séptimo, con desventaja en la pizarra, la volvió a desaparecer con la casa llena. Ese gran slam –impulsado de cierta manera por el fuerte viento– encumbró a los Cocodrilos y dejó al capitalino como MVP indiscutible del pleito.
El villano
Frank Madan y Frank Luis Medina pelean por el premio negativo. En rol de apagafuegos, no pudieron preservar una ventaja de dos carreras tras la salida del abridor Lázaro Blanco.
El pinareño regaló par de boletos y dio un pelotazo en una entrada de labor, muy distante de su verdadero potencial.Madan, por su parte, no supo aprovechar una ventaja en el conteo contra Camero y permitió el jonrón decisivo.
Las reacciones
Armando Ferrer: Es importante arrancar encima, incluso dividiendo de visitadores sería un gran trabajo. Tras esta victoria me reuniré con mi colectivo para colegiar posibles cambios en la alineación que no puedo anunciar todavía.
Arruebarrena no ha estado bien como cuarto bate, se le ha visto desajustado y quizás por ahí venga alguna modificación. Hay managers que si ganan no cambian su lineup, pero estamos en una final y los pequeños detalles pueden definirlo todo.
No creo que tengamos un problema de presión, simplemente fallamos a la hora buena, el beisbol es así. Tenemos que enfocarnos en hacer los ajustes pertinentes para fabricar carreras.
Javier Camero: No hice nada que no haya hecho en el campeonato. Los dos batazos salieron en dos buenos momentos, pero al final ganamos por el esfuerzo colectivo. Agradezco a quienes me han nombrado MVP, pero todo el equipo influyó, todos son protagonistas.
Jefferson Delgado: Hemos llegado hasta aquí después de un tiempo, apoyándonos, disfrutando. En el equipo nadie se da por vencido, realmente nunca había visto al grupo así.
Podemos dar el paso y ser campeones, pues ya logramos una victoria frente a un pitcheo de primer nivel. Mucha gente ha venido a apoyarnos, se está viviendo una fiesta muy grande. Matanzas se merece esto.
Miguel Borroto: Ha sido un partido reñido, digno de una final. Un hombre nos empujó las cinco carreras y nosotros no bateamos. Dimos 13 jits, llenamos las bases, pero no logramos producir. Matanzas es un equipo grande, de mucha fuerza y así ganaron.
El pitcheo estuvo dominante de los dos lados, pero los relevos nuestros no estuvieron bien. Analizaremos después, porque no puede ser que los relevistas vengan tirando bolas y regalando boletos.
En la alineación del segundo juego debe entrar LoidelChapellí Jr. Jorge Luis Peña no está bien, hoy impulsó la primera carrera porque hizo contacto con la bola, pero se ha tomado muchos ponches, que es la acción más negativa de la ofensiva.
Lo que viene
El segundo duelo de la final tendrá como protagonistas iniciales a los derechos Noelvis Entenza y Josimar Cousín: un experimentado en estos menesteres y un joven que ya dio una gran demostración con el Latinoamericano repleto.
A priori, los Toros casi siempre saldrán con ventaja en el pitcheo, no solo por sus abridores, sino por la profundidad de su bullpen, al margen de lo que sucedió en el primer encuentro. Sin embargo, Cousín no ha sido tan constante y habrá que ver cómo se presenta en un duelo de máxima tensión para Camagüey, pues irse con dos derrotas del Cándido González sería fatal.
Entenza, por su parte, ha tenido un par de buenas salidas en la recta final del campeonato, incluida una notable en la propia plaza de los Toros. Luego de golpear primero, el cienfueguero saldrá a la lomita sin tanta exigencia y con la misión de completar, a lo sumo, cuatro o cinco entradas. Por ende, el relevo tendrá mucho mayor peso en el segundo partido para los Cocodrilos.
Fantastico!