Casi dos meses después de debutar en Las Mayores, el joven cubano Miguel Antonio Vargas conectó su primer jonrón en el Big Show durante el partido entre Los Angeles Dodgers y los St. Louis Cardinals, que culminó con victoria para los angelinos, el mejor equipo de la Liga Nacional.
Vargas, quien alineó como inicialista y octavo madero de los Dodgers, se vistió de largo en su primer turno con un batazo de 390 pies que se coló en las gradas entre el jardín izquierdo y el central. De esta manera, rompió una cadena de 35 comparecencias al plato sin pegar extrabases, luego de abrir su carrera en MLB con un doble en San Francisco.
El hijo del mítico Lázaro Vargas cazó una recta (93.5 millas) del zurdo Jordan Montgomery y la mandó a volar con una velocidad de salida de 101.1 mph, su cuarta conexión más fuerte desde que debutó con los Dodgers a principios de agosto.
Un total de 195 cubanos habían pegado al menos un jonrón en la historia de Grandes Ligas, lista que ascendió a 196 con el bambinazo de Vargas. Ese grupo lo comandan Rafael Palmeiro (569), escoltado por José Canseco (462) y Tany Pérez (379), los únicos antillanos con más de 300 vuelacercas en el béisbol de Estados Unidos.
A sus 22 años y 311 días, Vargas es el vigesimotercer cubano más joven en conectar un cuadrangular en MLB, listado que encabeza Jack Calvo desde hace más de un siglo. Calvo conectó su primer batazo de vuelta completa el 5 de junio de 1913, cuando tenía solo 18 años y 359 días.
Además de Calvo, solo otro cubano ha logrado un bambinazo en MLB antes de cumplir los 20 años. Hablamos de Zoilo Versalles, quien se llevó las cercas el 5 de agosto de 1959, con apenas 19 años y 230 días.
Vargas ha intentado abrirse paso en una franquicia sumamente competitiva como los Dodgers y hasta el momento ha disfrutado oportunidades en varias posiciones. Todavía no ha explotado en profundidad sus habilidades, pero la gerencia del equipo espera que más temprano que tarde logre demostrar todo su talento en el mejor béisbol del mundo.