El slugger cubano de los Astros, Yordan Álvarez, fue colocado este viernes en la lista de lesionados por molestias en el oblicuo derecho. El tunero tuvo que abandonar el equipo en Cleveland y regresar a Houston para una evaluación más exhaustiva que determinará si solo estará fuera por diez días o si se perderá más partidos.
Normalmente sería una noticia más, pero nada preocupa tanto a los aficionados cubanos como la salud de Álvarez, a sabiendas de que las lesiones podrían cambiar los destinos de su carrera. Si el toletero de los Astros se mantiene en forma y sin dolencias, tiene todas las papeletas para convertirse en el mejor bateador cubano de la historia; pero si las molestias lo golpean con asiduidad, la idea puede irse por el despeñadero.
Yordan no ha cumplido 26 años todavía y ya suma 115 jonrones y 338 impulsadas en Grandes Ligas. Si miramos la historia, el único cubano que con esa edad o menos logró números semejantes fue José Canseco (183 vuelacercas y 574 remolques). Otras grandes estrellas nacidas en la isla como Rafael Palmeiro (72-330), Tany Pérez (68-306) o Tony Oliva (46-148) quedan lejos del rendimiento del tunero con esa edad.
Entre todos los jugadores en la historia de MLB, Álvarez es el quinto con más jonrones en sus primeros 425 partidos, el onceno con más extrabases (220) y el decimosexto con más impulsadas. O sea, no existe ninguna duda de que si mantiene un paso similar durante varios años podría ser un legítimo candidato al Salón de la Fama.
Este año, el tunero va por 17 bambinazos, segundo de la Liga Americana tras Aaron Judge (19), y lidera Las Mayores en impulsadas (55). Además, es tercero de MLB en slugging (.589) y OPS (.977), números de estrella con gran significado para los Astros, que en la presente temporada han encontrado un duro competidor (Texas Rangers) en el Oeste del joven circuito.
La gran duda, insisto, es su salud. Entre 2020 y 2022, Yordan se perdió cerca del 27 % de los juegos de los Astros (102 de 384); la mayor parte de ellos por dos operaciones de rodilla en la campaña recortada por la pandemia. Ya es una cantidad significativa para un lapso de tiempo no tan grande, lo cual puede afectar los totales de su carrera y comprometer la magnitud de su legado.
Rápidas de la semana
* En los primeros 329 juegos de su carrera, el avileño Adolis García solo consiguió un partido de al menos 4 jits, el 24 de julio de 2022 en un duelo entre Texas y Oakland. Esta temporada, en cambio, el patrullero de los Rangers ha logrado 3 choques de 4 imparables, el último de ellos el pasado martes contra los Cardinals, el equipo que lo firmó y lo hizo debutar en MLB hace cinco años. Adolis ha dado un salto de calidad este año. En sus primeros 60 partidos tiene un promedio de embasado de .328, más de 30 puntos por encima de su media histórica. La clave para él es que está siendo mucho más selectivo, tal cual lo expresa la disminución de su tasa de swings contra lanzamientos fuera de la zona (35.2 % en su carrera, 28.8 % en el 2023). Próximamente analizaremos en profundidad esta mejoría de Adolis.
* Desde que comenzó junio, el cubano José Dariel Abreu ha pegado al menos un imparable en 7 de los 8 partidos que ha jugado, incluido un jonrón en el maratónico duelo de 14 episodios entre Cleveland y Houston este viernes. Sin embargo, también lleva al menos un ponche en los últimos 7 encuentros, su peor racha con la camiseta de los Astros. Hasta el momento, Abreu ha sido retirado por la vía de los strikes en el 23.5 % de sus comparecencias al plato, la mayor tasa de su carrera. Aunque el estelar cienfueguero ha dado leves señales de mejoría, todavía le queda mucho trabajo por delante para recuperar su versión más letal.
* El miércoles 7 de junio, en la baja de la novena del duelo entre los Rays y los Twins en el Tropicana Field de Tampa, el pinareño Randy Arozarena enganchó un splitter 98.3 millas del relevista Jhoan Durán y decidió el partido con un jonrón por el bosque derecho. Según los datos de Francys Romero, el patrullero de los Rays es el tercer cubano con un walk-off HR ante un lanzamiento de 98+ millas. Antes solo lo habían hecho el matancero Yadiel Hernández (ante un sinker de 99.7 millas de Manuel Rodríguez en 2021) y Jorge Soler (ante una recta de 99.1 millas de Hunter Harvey hace 3 semanas). Por cierto, esta semana Luis Robert también logró un walk-off con un sencillo al izquierdo para darle la victoria a los White Sox sobre los Marlins.
* Yu Darvish se apuntó este viernes la victoria sobre Colorado y se convirtió en el segundo lanzador japonés con 100 victorias en Grandes Ligas. A pesar de que muchos tiradores nipones han llegado a MLB como grandes promesas del picheo, no son tantos los que han logrado triunfar. Darvish es una de las excepciones de la regla. El derecho de los San Diego Padres necesitó 11 campañas y 254 aperturas para llegar al centenar de triunfos, cifra que solo Hideo Nomo (123) había logrado entre los serpentineros japoneses. Darvish (36 años) suma además 1862 ponches y va camino a quebrar el récord para nipones, también en poder de Nomo, quien retiró a 1918 bateadores por la vía de los strikes. Si no se tuercen las cosas, Darvish podría ser el primer japonés con 2000 estrucados en Grandes Ligas.
* El dominicano Esteury Ruiz (Oakland Athletics) llegó este viernes a 30 bases robadas, líder absoluto de la temporada. Esta es la cuarta mejor marca en los primeros 63 partidos de una temporada desde 2010 hasta la fecha, solo superado por Dee Gordon (36 en el 2014), Billy Hamilton (36 en el 2015) y Jacoby Ellsbury (31 en 2013). En la historia de los Athletics, el hombre con más estafas en los primeros 65 duelos de una campaña no podía ser otro que Rickey Henderson, líder histórico de MLB en este departamento. Henderson se robó 64 bases en los 65 duelos iniciales de 1982 y 36 en 1981. La tercera mejor marca para la franquicia la comparten el cubano Bert Campaneris (33 en 1969) y Eddie Collins (33 en 1910).
* Ya tenemos más de 60 partidos en la temporada y el venezolano Luis Arraez sigue bateando .400. “La Regadera” de los Marlins es líder de la Liga Nacional en jits (88) y de MLB en promedio de embasado (.449). El último campeón de bateo con un average de más de .400 fue Ted Williams (.406) hace 82 años, en 1941. En los últimos 75 años, solo 4 hombres habían bateado para más de .400 en los primeros 65 partidos de una temporada: John Olerud (.405 en 1993), Larry Walker (.409 en 1997), Tony Fernández (.403 en 1997) y Chipper Jones (.420 en el 2008). Ninguno de ellos terminó esas campañas por encima de .400. ¿Podrá Luis Arraez cambiar el curso de la historia?
* La rivalidad entre Yankees y Red Sox vivió este viernes su primer episodio de 2023. Boston se llevó la victoria en el Bronx, apoyados en un cuadrangular del dominicano Rafael Devers, quien llegó a 20 vuelacercas en el clásico duelo del Este de la Liga Americana. Revisando los archivos, el único jugador de Boston con tantos vuelacercas ante los Yankees con 26 años y 229 días (la edad exacta de Devers) es Ted Williams. O sea, si de producción jonronera hablamos, el el actual antesalista de los Red Sox está emulando a una de las más grandes leyendas del juego.