A la Serie Nacional y a las autoridades beisboleras cubanas le siguen llegando peticiones de jugadores que desean reinsertarse en el clásico doméstico. Hace unas horas se conoció de la voluntad de Héctor Olivera de volver a Santiago de Cuba, y ahora es el pinareño Yosvany Peraza quien pretende enfundarse de nuevo en la casaca de los Vegueros, aunque con algunas condiciones.
El fornido receptor, quien ha jugado durante los últimos años en Italia, aseguró al periodista Ernesto Amaya, de Radio Guamá, que había enviado a Cuba una carta solicitando su reinserción, noticia que también confirmó el comisionado provincial de la disciplina en Pinar del Río, Sergio Adam Hernández.
“No tengo nada en contra de jugar en Cuba, pero tengo poco tiempo”, precisó Peraza, quien puso así la primera condición para su regreso a la Serie Nacional.
El máscara vueltabajero, que cumplió 40 años en febrero pasado, dijo que solo jugaría con los Vegueros y que en ningún caso lo haría como refuerzo de otro plantel.
Teniendo en cuenta este detalle y el calendario de la venidera Serie Nacional, Peraza solo tendría oportunidad de jugar si Pinar del Río clasifica a la postemporada, que justamente inicia en el mes de enero.
“Si ellos están de acuerdo, no habrá problema”, sentenció Peraza, uno de los más recios toleteros del béisbol cubano en la pasada década.
“El Gordo”, como popularmente se le conocía en los diamantes de la Isla, pegó 249 vuelacercas en los clásicos domésticos, a razón de uno por cada 17.9 veces al bate. Además, remolcó 883 carreras, anotó 594 y dejó línea ofensiva de .298/.390/.508, todo ello pese no estar siempre como titular.
Su último duelo en la Serie Nacional fue el 15 de febrero del 2015, cuando bateó de emergente por Olber Peña en un duelo que los pativerdes perdieron 10-5 contra los Tigres avileños, en el parque José Ramón Cepero.
Solo unos días antes, Peraza y los Vegueros habían regresado victoriosos desde San Juan, Puerto Rico, donde ganaron la Serie del Caribe de manera espectacular.
Pero después del éxtasis del triunfo y el retorno a la Isla, a Peraza le llegaron noticias inesperadas: estaba siendo acusado de tráfico de personas y sería expulsado del campeonato. Pasaron los días, los meses, y nada más se supo de “El Gordo”, a quien ningún medio de la Isla volvió a mentar.
Tampoco se revelaron más detalles de aquella historia delictiva, la cual, al parecer, quedó en nada, sin pruebas ni condena. Al cabo del tiempo, en el 2016, Peraza reapareció en Italia, donde comenzó a jugar en la Liga Federal A, con el Castenaso, club en el que todavía milita.
Hace menos de dos años, Peraza dijo al propio Ernesto Amaya que no jugaría más en Cuba, a pesar de extrañar a su provincia, pero evidentemente ha cambiado de parecer. Ahora está por ver si su solicitud procede, y si los Vegueros llegan lo suficientemente lejos en la campaña para suerte de “El Gordo”.
Con 40 años y poniendo condiciones, y quien le dijo a el que Pinar del Rio va a necesitar de sus servicios. Me parece que ya su carnaval pa’so y si quiere volver a Pinar de Rio ser’a para sembrar tabaco