Yasiel Puig sigue generando titulares y no precisamente por sus batazos, sus espectaculares tiros desde los jardines o sus excentricidades en el diamante beisbolero. El pelotero cubano, volcado al trabajo comunitario, es uno de los grandes protagonistas de la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, donde ha dejado ver su faceta más humilde y solidaria.
El cienfueguero lleva semanas de intensa labor, enfocado en tender la mano a los más necesitados, tanto en la costa oeste del país como en la Florida. Allí es visto como un auténtico súper héroe por su bondad y apoyo total a las autoridades en la contención del coronavirus, que ha cobrado la vida de más de 64 mil personas en la nación norteña.
Su última aparición fue en Miami Lakes, donde realizó una donación de bolsas de comida a alrededor de 200 residencias con personas mayores. Orlando Cid, alcalde de la comunidad, dijo que la faena de Puig es muy importante y la población siempre lo agradece, más en estos tiempos.
Yasiel ha repartido alimentos en varios puntos del sur de la Florida en las últimas semanas, y realizó una donación de 2.000 dólares en mascarillas y guantes, lo cual demuestra que está totalmente implicado en acabar con la pandemia que ya ha afectado a más de un millón de personas en Estados Unidos.
Según el reporte del colega Jorge Ebro, Puig tiene una alianza con los Supermercados Presidente, con quienes ha participado en varios eventos de ayuda a los más pobres y al personal de la salud que trabaja en la primera línea.
“Nunca ha dicho que no a una colaboración, siempre nos está dando ideas sobre cómo ayudar. Quisiera que otros peloteros, que sé que son buenas personas, dieran el paso al frente y se dejaran ver más entre la gente”, aseguró a El Nuevo Herald Osvaldo Pérez, encargado de publicidad de Presidente.
Puig ha mostrado su alma caritativa desde que despuntó en el béisbol de Estados Unidos hace ya seis años. Por ejemplo, en el 2017 donó 20 mil dólares a los damnificados por el huracán Harvey en Houston, y también ha realizado un valioso trabajo comunitario con su organización Wild Horse Children´s Foundation en Los Ángeles, Cincinnati y la Florida.
Además, la fundación, ha trascendido fronteras, llevando su mano a República Dominicana y Cuba, donde realizó una importante donación de medicamentos, juguetes y artículos de uso diario en el Hospital Pediátrico “Paquito González Cueto” de la capital cienfueguera.
El trabajo comunitario de Puig, agente libre en la actualidad, ha difuminado un poco los reportes que lo ubicaban como próximo jugador de los Gigantes de San Francisco. El colega Francys Romero informó al respecto la semana pasada, pero la gerencia del club californiano ha negado cualquier acercamiento con el cubano.
El propio Puig no quiso mojarse sobre el tema y en sus más recientes declaraciones dijo que se había enterado de su supuesta vinculación con los Gigantes por la prensa.
“Sobre lo del contrato, pues yo me entero de eso por ustedes (los periodistas) en las noticias, o por amigos que siguen las noticias y me lo comentan”, dijo el antillano a El Nuevo Herald.
“Hay cosas peores en este momento, como la pandemia. Todavía no sabemos si va a terminar, si habrá una cura o se abrirá el país. Solo me queda seguir entrenando en la casa y ayudar a las personas”, añadió el cienfueguero, que entró a la agencia libre al finalizar la pasada temporada.
El cubano precisó que tendrá que seguir esperando en buenas condiciones para cuando se le dé la oportunidad de regresar a un equipo de Grandes Ligas, luego de sus experiencias en los Dodgers de Los Ángeles, los Rojos de Cincinnati y los Indios de Cleveland.
“Solo espero que Dios, que todo lo dispone, tenga algo para mí. Ahora lo principal es arrimar el hombro y esperar que esto pase. No hay que pensar en lo que no ha sucedido”, concluyó.