La incertidumbre finalizó. Llegado el momento, comprendimos que ningún boxeador de la súper elite profesional se subió al vagón de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La puerta abierta por la Asociación Mundial de Boxeo Asociado (AIBA) no logró atraer del todo para la ocasión a los pugilistas del mayor nivel en el boxeo profesional… aunque sí a algunos con experiencia en ese campo.
Desde este domingo y hasta el próximo viernes, se otorgan los últimos 26 cupos que restan para la lid de Brasil en el preolímpico de Venezuela. Sacadas las cuentas, fueron 14 las naciones que inscribieron a pugilistas con experiencia en el panorama profesional. Entre ellos, el más conocido es el camerunés Hassan N’Dam, otrora excampeón del orbe interino de la Asociación Mundial (AMB) y la Organización Mundial (OMB).
Pero no están en la nación sudamericana algunos que, en algún momento, vendieron su presencia. Extraclases como el ucraniano Vladimir Klitschko, los rusos Sergei Kovalev y Denis Lebedev, e incluso, el filipino Manny Pacquiao, hoy miembro del Senado de su país, al parecer sintieron la presión de promotores, televisoras y entidades, o bien finalmente no les interesó la propuesta.
Hassan N’Dam (33 victorias, 2 derrotas y 19 nocauts) es el hombre a seguir en el Domo José María Vargas, localizado en Maiquetía, a 25 kilómetros de Caracas. El africano, de 32 años de edad, debe avanzar sin muchas complicaciones en una categoría donde Cuba tiene altas pretensiones para la cita de los cinco aros. N’Dam peleará en los 81 kilogramos, división del trimonarca universal Julio César La Cruz.
El camerunés tiene vasta experiencia competitiva. Sus únicos fracasos han llegado contra dos rivales de suprema calidad como el norteamericano Peter Quillin, en 2012, y ante el muy bien ranqueado canadiense David Lemieux, hace unos pocos meses, el pasado 20 de junio. Ambas frustraciones fueron en boletas; no ha sido noqueado durante su carrera.
La historia nos dicta que los mejores resultados del camerunés han llegado en peso medio (160 libras – 72,6 kg). Su último combate lo disputó el 27 de mayo anterior contra el polaco Robert Świerzbinski, a quien noqueó sin muchas dificultades. La báscula lo dejó en aquella ocasión en 164.5 libras (74.7 kg), por lo que es fácil advertir que lucha su ticket para la “Ciudad Maravillosa” algo “pasadito” en cuanto a peso corporal.
Precisamente, la división semicrucero fue la que más contrincantes profesionales registró, con siete de los 13 participantes. Todos lidian por solo tres boletos, misma cifra de clasificados que brindan 49, 52, 56, 60, 64, 69 y 75, mientras que 91 y +91 kilos solo fichan al medallista de oro.
Al estado venezolano de Vargas arribaron 79 boxeadores entre las 10 categorías. Del total, 16 son profesionales, con el tailandés Amnat Ruenroeng (17-1, 5), como otro de pedigrí sustentado. Este veterano de 36 años también tiene carretera en la disciplina, al ostentar medalla de bronce en el mundial de Chicago, en 2007, como amateur, aunque un año después quedó eliminado en los Juegos Olímpicos de Beijing en cuartos de final.
El asiático, de la división del espirituano Yosvani Veitía (52), ganó la faja interina de la Federación Internacional (FIB) en 2014, la cual cedió el último 25 de mayo a manos del filipino Johnriel Casimero. Ese mismo día perdió su invicto.
Los restantes profesionales que se encuentran en Venezuela son Denys Solonenko (Ucrania), Hermógenes Elizabeth (Nicaragua), Carmine Tommasone y Massimiliano Ballisai (Italia), Carlos Aquino (Argentina), Carlos Portillo (Paraguay), Geard Ajetovic y Petar Maukovic (Serbia), Evan Need (Aruba), Ladislav Kutil (República Checa), Norbert Nemesapati (Hungría), Petru Ciobanu (Moldavia), Newfel Ouatah (Argelia) e Israel Duffus (Panamá).
Cuba logró para Río de Janeiro su primer equipo completo desde Atenas 2004. Así, tras la calificación hace unos días del cienfueguero Robeysi Ramírez, serán diez nuestros exponentes. Completan el listado Joahnys Argilagos (49), Lázaro Álvarez (60), Yasnier Toledo (64), Roniel Iglesias (69), Arlen López (75), Julio César La Cruz (81), Erislandy Savón (91), Leinier Peró (+91), y los antes citados Veitía y La Cruz.
Las autoridades de este deporte en la Isla han manifestado que el objetivo en Brasil será superar lo alcanzado en Londres 2012 –dos títulos-, sin embargo, para ser un análisis lo más certero posible y completamente apegado a la realidad, es necesario esperar a la conclusión de la eliminatoria en Maiquetía. Solo en ese instante lograremos conocer los rivales e intentaremos vaticinar qué puede suceder con el buque insignia del deporte cubano cerca del Cristo Redentor en agosto venidero.
El autor debio decir que “el norteamericano Peter Quillin” es en realidad cubano-americano, pues su padre nacio y crecio en Cuba.
Manolo, si es nacido en Estados Unidos, es norteamericano, para mi un cubano-americano es el nacido en Cuba que se hace ciudadano de ese pais. Los nacidos en Cuba que viven en Cuba son cubanos, los nacidos en Usa que viven en Usa son Norteamericanos.