Ambas noticias ya se socializan por toda la web y comienzan a transitar por calles y hogares del país. Una viene acompañada por el acostumbrado halo de misterio, la otra es información oficial. Empecemos por comentar esta última dada la importancia que reviste.
Al leerla son muchas las preguntas que se agolpan en la mente, y es que solo deja asomar la puntica del iceberg. Da igual, ese pequeño detalle basta para presentir que esta vez sí vienen cambios significativos en la estructura y el funcionamiento del deporte en la isla.
El Estado cubano comenzará a aplicar una nueva política de remuneración para atletas, especialistas y entrenadores deportivos. Así fue anunciado por los diversos medios oficiales que se hicieron eco de la sesión del Consejo de Ministros, celebrada este fin de semana. Según informa el periódico Granma en su sitio digital, el debate y aprobación de la normativa formó parte de las discusiones en torno a la actualización del modelo económico cubano.
Los detalles que se brindan no van más allá de lo dicho en el párrafo anterior. Sobre el tema se profundizará en los días venideros, anuncia el rotativo. Claro que la incertidumbre se aquieta un poco (o quizás aumenta), a partir de pequeñas pinceladas que comienzan a aparecer sobre lo que significará en la praxis esa política. Al parecer hay dos cuestiones fundamentales. Por un lado se espera una flexibilización en las gestiones individuales de atletas y entrenadores para ser contratados en el exterior; y muy vinculado a ello debe estar una redistribución de las ganancias que se obtienen por esta vía. Un nuevo reparto que lógicamente, y contrario a la realidad que existe hoy, debe elevar de manera razonable los porcientos que ingresen a los bolsillos de entrenadores y deportistas.
Al final considero que lo más prudente es esperar a que se publique el documento oficial. Solo así será posible comprender el verdadero alcance de los cambios anunciados. No es cosa de juego. Sabemos que los preceptos que guiaron el decurso de nuestro deporte, por más de medio siglo, han estado enfrentados por completo a las dinámicas que rigen el universo atlético desde hace bastante tiempo. ¿Llegó el momento de dar una solución real y definitiva a esta lucha de contrarios? Al menos la deteriorada salud del deporte cubano así lo exige. Desde Oncuba estaremos al tanto del instante en que se revele la totalidad del iceberg, y ojalá sea bien pronto.
Casi olvido referir la otra noticia. Circula el rumor, y no parece tan absurdo, de la salida ilegal del lanzador pinero Raciel Iglesias, una de las grandes promesas del béisbol nacional. A partir de declaraciones hechas por fuentes cercanas al atleta para el sitio web CaféFuerte, todo indica que Raciel abandonó la isla en una embarcación el pasado sábado y en la actualidad su paradero es desconocido.
A los 23 años y con las condiciones necesarias para estar en la mira de varios scouts de las Mayores, Iglesias había tenido un año de lujo con la selección nacional. Intervino en el III Clásico Mundial y durante los topes amistosos celebrados en Estados Unidos, ante un team universitario norteño, se mostró inmenso en cada aparición que tuvo.
De confirmarse su salida, como bien señala en su página CaféFuerte, sería el cuarto pelotero que pierde este año la selección nacional, pues ya antes habían “desertado” en viajes al exterior Odrisamer Despaigne y Misael Siverio, al tiempo que José Darie Abreu se marchaba rumbo a Haití en el mes de agosto.
Foto: Ismael Francisco (tomada de Cubadebate)