Redacción OnCuba
París amaneció este 26 de julio de 2024 con algunas lluvias y la preocupante noticia de actos que se han descrito como un “sabotaje coordinado” en tres de las cuatro principales líneas de tren de alta velocidad, todo a horas de la fastuosa y promocionada ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos, que por primera vez en la historia se realizará fuera de un estadio.
El primer ministro en funciones, Gabriel Attal, ha denunciado en un mensaje colgado en su cuenta de X lo que ha calificado como “actos de sabotaje” que se han desarrollado “de forma preparada y coordinada” y que está teniendo consecuencias “masivas y graves” en la red ferroviaria, precisó EFE.
El propio Attal ha anunciado que los servicios secretos y las fuerzas del orden “están movilizados para encontrar y castigar a los autores de esos actos criminales”, mientras La Justicia y los servicios secretos han abierto investigaciones por diversos delitos castigados con penas de entre 10 y 20 años de cárcel y con multas entre 150 000 y 300 000 euros.
De acuerdo con diversos reportes, los ataques se produjeron entre la madrugada y la mañana de este viernes y consistieron en el incendio de tres instalaciones de señalización de las líneas de trenes de alta velocidad que se dirigen desde París hacia el norte, hacia el este y hacia el Atlántico. También se produjo una tentativa en el cuarto eje francés rumbo al sureste (hacia Lyon, Marsella y Barcelona), pero fue “frustrado, según CNN.
Se estima que 250 000 viajeros ya se han visto afectados por los ataques masivos, cifra que podría incrementarse hasta los 800 000 durante todo el fin de semana. Además de la inauguración de los Juegos Olímpicos, este es uno de los fines de semana más cargados en Francia por los viajes de las vacaciones de verano.
Por el momento, la Sociedad Nacional de Ferrocarriles ha aconsejado a los viajeros que no acudan a las estaciones a menos que reciban un SMS que les avise de que su tren va a circular.
Desde múltiples medios occidentales se había alertado de la creciente preocupación en París por posibles atentados terroristas. Durante las últimas horas han aumentado los dispositivos de seguridad en la capital gala, donde se estima que en la ceremonia inaugural de los Juegos habrá unos 50 000 policías a lo largo del recorrido por el Sena, apoyados por alrededor de 20 000 efectivos del Ejército y vigilancia privada.
La otra gran preocupación horas antes de la apertura oficial de los Juegos Olímpicos es la lluvia, que ha estado afectado la capital francesa. Meteorólogos locales han advertido que hay altas posibilidades de precipitación en la noche.
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