Si existe una manzana de la discordia en el ámbito deportivo cubano, es el equipo Industriales. Nadie puede comprender las pasiones que despierta el equipo de la capital entre las personas que siguen el béisbol en Cuba. El escritor Leonardo Padura lo confiesa: “la pertenencia a un equipo deportivo es como una maldición que lo persigue a uno para toda la vida”.
En mi opinión, la rivalidad propia del deporte ha logrado que en Cuba existan dos categorías de fanáticos: los industrialistas y los anti. Los primeros están claros, son aquellos que corean: “Azul es el cielo, azul es el mar…”. Entre los últimos se insertan también quienes, aun sin ser seguidores del béisbol, se definen por otros equipos cuando Industriales juega.
Diferentes generaciones de veteranos del equipo Industriales fueron a celebrar los 50 años de la fundación del equipo capitalino a los Estados Unidos, específicamente a las ciudades de Miami y Tampa, en las cuales viven un número considerable de cubanos, con la intención de reencontrase con sus antiguos compañeros de equipo que no viven en Cuba y realizar con ellos varios topes deportivos. Sin embargo, en la llamada “capital de exilio cubano” varios grupos se opusieron radicalmente a la celebración de dichos partidos.
Lo acontecido durante el reencuentro entre los Industriales de uno y otro lado del Estrecho de la Florida, nos lo trae de vuelta un documental en post-producción: “Juego bajo protesta”, cuyo guion está signado por el reconocido editor cubano Manuel Iglesias, quien además es co-director de la obra junto a la productora Irdres García.
“Cuando nos enteramos de que el equipo de béisbol más popular de Cuba, Industriales, estaría visitando Miami por primera vez en 50 años, sentimos que era un evento único que merecía ser grabado”, se puede leer en la campaña de financiamiento que ha sido lanzada para culminar el documental.
“La visita de los veteranos del equipo Industriales fue una idea que concibieron el comediante Otto Ortiz y el periodista deportivo Yasser Porto, a la que sumaron a la empresa Somos Cuba Group, radicada en Miami, para que gestionase el evento. Todos los peloteros que ofrecen sus testimonios en el documental fueron filmados en Cuba antes del viaje y acá en Miami durante todo el tiempo que transcurrió el encuentro, desde el 11 de agosto hasta el 1ro de septiembre de 2013”, precisa Iglesias a OnCuba.
Las voces de Armando Capiró, Tony González, Rey Vicente Anglada, Pedro Medina, Lázaro Vargas, Armando Ferreiro, Juan Padilla, Javier Méndez, Lázaro Valle y Enriquito Díaz, se unen en este documental a las de intelectuales como Leonardo Padura y Gustavo Arcos, y los cineastas Fernando Pérez y Jorge Perugorría, entre otros, quienes de alguna manera revelan “el impacto que han tenido las políticas de la Revolución Cubana sobre su gente”, según se indica en la campaña. También aparecen testimonios de muchas personas a favor o en contra del reencuentro y celebración de los 50 años de la creación del equipo Industriales.
“Finalmente se celebraron 3 partidos: dos en Tampa y uno en Fort Lauderdale. Este último fue donde los organizadores consiguieron un estadio lo más cercano a Miami, en virtud de que allí no les fue posible. En Miami no se jugó ningún partido, pero muchos de sus fanáticos fueron hasta Tampa y Fort Lauderdale, y hasta allí también llegaron a protestar quienes se oponían al intercambio. Todo eso está registrado en el documental”, declara Iglesias.
Quedan por filmar pequeñas entrevistas para complementar la estructura del documental, componer y grabar la música original y las etapas finales de post-producción, que incluyen corrección de color, mezcla y copia definitiva.
Es por ello que el equipo de producción ha seleccionado la variante del financiamiento colectivo a partir de las contribuciones de personas interesadas y, sobre todo, seguidores del equipo azul.
Saludos cordiales:ojalà terminen pronto, pues estoy loco por verlo. Afectos