La pequeña delegación cubana que compitió en los Juegos Paralímpicos de París finalizó en el puesto 24 del medallero, la cuarta mejor ubicación histórica de las comitivas de la isla desde que comenzaron su participación en estas lides en Barcelona 1992.
Guiados por el firme paso de Omara Durand, de nuevo reina de las pistas por partida triple, los saltos de Robiel Yankiel Sol, la potencia del jabalinista Guillermo Varona y la entrega sin límites de Yunier Fernández con su raqueta, el pabellón antillano cosechó seis oros, tres platas y un bronce, suficiente para mejorar 11 escaños respecto a los Juegos de Tokio 2020.
Juegos Paralímpicos: Cuba mejora en París su actuación de Tokio 2020
Hace tres años en la capital japonesa solo se ganaron cuatro coronas y seis preseas de manera general, todas en el atletismo. Ahora, además de las conquistas en el campo y pista (también subieron al podio Luis Yamel Vives y Ulicer Aguilera), se sumaron al medallero el tenis de mesa con la espectacular actuación de Yunier, el judo (plata de Sheyla Hernández) y las pesas (plata de Pablo Ramírez).
Esta es la primera vez que en unos mismos Juegos Paralímpicos Cuba gana medallas en más de tres deportes, con el estreno del tenis de mesa y la halterofilia. Sin dudas, esta última es una de las notas más relevantes de actuación caribeña en París, donde se regresó al Top-25 del ranking final.
En Londres 2012, Cuba consiguió su mejor actuación histórica en estos certámenes tras ubicarse en el puesto 15, con nueve oros, cinco platas y tres bronces. El cómputo de 17 preseas de la capital británica es el más alto de una delegación antillana.
Juegos Paralímpicos: título de Yunier Fernández impulsa a Cuba en el medallero
Cuatro años más tarde el récord tembló en Río de Janeiro, pero finalmente la cosecha quedó en 15 metales, ocho de ellos dorados para concluir en el puesto 18 entre más de 155 países que participaron.
En Atlanta 1996, Cuba ganó ocho de oro con particular destaque de Oscar Moya y Enrique Caballero, quienes contribuyeron con un doblete dorado para culminar en el puesto 23 del medallero. Similar ubicación se logró en Beijing 2008, aunque con solo cinco coronas.
Tomando en cuenta todos estos referentes, no es complicado entender que lo logrado en París tiene un valor enorme y supera ampliamente las expectativas. Además, el botín de la urbe francesa nos permite superar el centenar de medallas en Juegos Paralímpicos y nos deja a solo un oro de completar las 50 coronas.
Juegos Paralímpicos: tercer oro de Omara Durand y plata de Sheyla Hernández
La cita gala confirmó a China como la gran potencia del movimiento paralímpico. Los asiáticos superaron los 90 cetros (94) por cuarta edición consecutiva y fueron los únicos con más de 200 preseas (220), escoltados por Gran Bretaña (49-44-31-124) y Estados Unidos (36-42-27-105).
En el orden individual, la nadadora china Yuyan Jiang fue la reina de los Juegos con un impresionante total de siete coronas. La chica de solo 19 años (cumple 20 en noviembre) dominó especialidades del estilo libre, espalda y mariposa, así como dos pruebas de relevo. Jiang ya había ganado dos cetros en Tokio, por lo que en su palmarés ahora relucen nueve oros paralímpicos.
Entre los hombres, otro nadador reinó en París. Hablamos del italiano Stefano Raimondi, dueño de cinco pergaminos dorados y una plata, con la particularidad de que subió al podio en cada uno de los cuatro estilos.