El maratón más popular de Cuba, 31 años después de su primera edición, aún corre a ritmo de récord. En Marabana 2017 participaron más de 5 mil personas, aunque la cifra varía según varios sitios.
El diario Granma habla de 5,098 corredores, de ellos 3,717 nacionales y 1,381 extranjeros; mientras Jit contabiliza 5,190, como dice otro medio digital. Más allá de cifras, la carrera aumenta su capacidad de convocatoria, impulsada por los amantes de caminar o correr.
Henry Jaen, el santiaguero incombustible, lideró la maratón masculina de 42 kilómetros y 195 metros, con crono de 2:28.42 horas. En la prueba reina, la que más exige al cuerpo y la mente, se convirtió en el máximo ganador histórico con cinco títulos (2006, 2007, 2013, 2016 y 2017).
Jaen es ahora el rey entre los varones al superar las cuatro coronas del habanero Jorge Luis Suárez. Este domingo empató, además, la marca absoluta de la maratón con la habanera Emperatriz Wilson, quien se impuso consecutivamente de 1999 a 2001 y después 2003 y 2004.
“El circuito estuvo bien, me sentí relativamente cómodo por el clima favorable. Para nadie es un secreto que este circuito es duro pero me preparé bien y salió el resultado. La primera vuelta me mantuvo tranquilo y apreté en la segunda al llegar a la pendiente, ya en ese momento empecé a trabajar las lomas como de costumbre y eso me permitió conseguir una distancia considerable”, dijo Jaen, quien ganó el derecho de participar en la Maratón de París, reconocimiento de Air France para el vencedor de la prueba.
El disparo de arrancada se escuchó en horas de la mañana en el punto de salida y meta, en el Paseo del Prado entre Teniente Rey y San José. El circuito para las Carreras de Maratón y Media Maratón está certificado por la Asociación Mundial de Maratones (AIMS) y por la Federación Internacional de Atletismo, una atractivo mayor para los cientos de corredores extranjeros que llegan cada año.
Entre las mujeres, la santiaguera Yudileyvis Castillo emuló a Jaen, con tiempo de 2:46.36 horas, mientras en la media maratón dominó Dailin Belmonte ( 1:16.44 horas). En esta última distancia, Richer Pérez (1:06.18) triunfó entre los hombres.
Por vez primera, en la media maratón se entregó el premio de la Asociación de Atletismo de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe (Nacac), obtenido en lo individual por Belmonte y Pérez, y para Cuba en lo colectivo.
En los 10 kilómetros ganaron los cubanos Luis Ernesto Hernández (33:04 minutos) y Leslie Amat (39:33), entre hombres y mujeres, respectivamente.
En Marabana, explica la web oficial, se realizan campeonatos abiertos para corredores y caminantes convencionales, Elites, no Elites, Máster, Discapacitados (ciegos, sordos y corredores en sillas de ruedas), en maratón (42 Km y 195 metros); media maratón (21 Km y 09750 metros) y los 10 kilómetros.
El recorrido por La Habana comprende las las calles y avenidas de Prado, Refugio, Zulueta, avenida De las Misiones; Malecón; Calzada; calle 12; calle 23; avenida 26; Boyeros; Santa Catalina; Primelles; Vía Blanca; Boyeros; Salvador Allende; Reina, Prado.
Para la ocasión, se presentaron más de 3,700 participantes nacionales, junto a extranjeros provenientes de 66 países. Ciegos, sordos, corredores en sillas de ruedas, se unieron a los atletas convencionales para vivir el evento de mayor convocatoria deportiva en la Isla. Hasta un niño, con un pomo de agua entres sus manos, atravesó la meta frente al Capitolio habanero.
El proyecto no sólo incluye La Habana. El tercer sábado de noviembre, en todos los municipios cubanos, se realiza Maracuba, que convoca, anualmente, a otros miles de aficionados.