El viaje de los veteranos de Industriales a Estados Unidos para festejar los 50 años del equipo azul ha sido una odisea. Después de semanas todo comienza a concretarse. Al menos los peloteros viajarán este domingo a Miami.
Dos de sus más fieles estandartes, Juan Padilla y Lázaro Vargas, aseguraron a OnCuba que esta es una oportunidad única para unir a los jugadores residentes en uno y otro país, sin importar sus afiliaciones políticas o los móviles que algún día tuvieron para tomar determinadas decisiones.
“Lo importante es jugar pelota, demostrar que con el béisbol podemos imponernos por encima de todo. A fin de cuentas, de eso se trata el deporte, de unificar, de promover y estimular la paz”, expresó Lázaro Vargas tras un entrenamiento en el Estadio Santiago “Changa” Mederos de la capital, donde el grupo de diez luminarias se prepara en función de llegar en las mejores condiciones a Miami.
“Hemos entrenado desde que Alejandro Cantón, presidente de Somos Cuba, nos manifestara su interés y deseo de materializar un proyecto por y para el béisbol, más cuando el motivo es festejar el cumpleaños de Industriales, un equipo querido por millones de personas en Cuba y fuera del país”, sentenció Padilla, entusiasmado con la posibilidad de materializar un sueño.
“Para todos será una gran experiencia, porque todos, los de aquí y los de allá, tenemos presente el significado de vestir la camiseta de Industriales, justo lo que vamos a honrar quienes en algún momento defendimos estos colores, así como los que fueron nuestros contrarios y vivían de manera especial los duelos”, explicó Vargas en clara alusión a los partidos que sostendrán en suelo estadounidense.
De entrada, junto a Vargas y Padilla viajarán este domingo los receptores Pedro Medina y Armando Ferreiro, los infielders Rey Vicente Anglada, Enrique Díaz y Tony González, los jardineros Armando Capiró y Javier Méndez, y el lanzador Lázaro Valle, quienes primero enfrentarán a industrialistas radicados en Miami y luego ambos conjuntos se fusionarán para medirse a una selección de jugadores de otras provincias que también vivan en Estados Unidos.
Sin dudas, muchos rumores y especulaciones se han levantado acerca de cómo manejará el manager Pedro Chávez el reducido conjunto procedente de la Isla, sobre todo por la disyuntiva de cuál de los infielders se mudará a las praderas un par de horas, así como quien será el relevo de Lázaro Valle en caso de no encontrarse en su mejor jornada en la lomita.
Respecto a la segunda variante, en la que ambas novenas lucharán nuevamente con el mismo uniforme frente a jugadores de otras provincias, podrán verse confluir en el dogout a figuras como Manuel Hurtado, Julio Rojo, Angel Leocadio Díaz, René Arocha, el torpedero Rey Ordóñez, y dos símbolos históricos del elenco: el inicialista Agustín Marquetti y el serpentinero Orlando “El Duque” Hernández.
Lo cierto es que, quienes jueguen, independientemente de la posición que ocupen en el campo, disfrutarán con un espaldarazo a los que se opusieron y prefirieron dar un paso al costado en la organización de la cita.
En honor a la verdad, al cobrar vida este proyecto, se hace justicia tras un absurdo silencio en Cuba sobre el medio siglo de existencia de Industriales, apenas abordado por los medios del país y sin una celebración organizada por las autoridades beisboleras, tanto las provinciales como los federativos nacionales, quienes también tenían la responsabilidad de rendir tributo a uno de los conjuntos que más gloria ha aportado al clásico de las bolas y los strikes en la Isla.
Ojalá esto rompa una puerta y pronto, antes del centenario azul, se pueda celebrar también, en su santuario del Estadio Latinoamericano, el 50 aniversario de Industriales.