Abraham Jiménez Enoa
Si en Cuba algo se espera de la edición XXIV de la Liga Mundial de Voleibol, es su regreso al Coliseo de la Ciudad Deportiva. Si algo tendrá de incentivo, de seductor, esta nueva versión de la lid, será el inmenso cúmulo de personas que irá hasta los predios de la instalación cada fin de semana para aplaudir, tras dos años, la vuelta a casa.
Aunque por estos días en La Habana llueve a cántaros y sin ánimo de cesar, desde el mediodía de ayer en las inmediaciones de la sede ya se podía palpar el ajetreo alrededor de los kioscos que, desde bien temprano, venden los tickets para los primeros choques contra Serbia.
Esta será una edición diferente. Y no diferente por el regreso de la Liga Mundial a una de sus más insignes sedes, ni será diferente por la enrevesada estructura que se pondrá en práctica por primera vez en un torneo de esta índole, ni mucho menos por la ya cacareada “renovación cíclica del equipo”.
Será una versión diferente simplemente porque, por primera vez, los federativos del deporte en Cuba han asumido como un trago amargo -a tragar al fin y al cabo- las poco seductoras condiciones en que se debate el voleibol cubano de hoy.
La débil selección que presentará Cuba en esta versión de Liga Mundial hace pensar que el único beneficio de la lid, para nosotros, será servir de sede durante las tres semanas correspondientes.
No obstante, en conferencia de prensa, Orlando Samuels, DT de la selección nacional, fue bien explícito al asumir cada una de las debilidades, que no son pocas, de la nueva versión de los cubanos. Partió de las notables ausencias de Wilfredo León y Yoandri Díaz para subrayar las casi nulas posibilidades del equipo al enfrentar una rigorosa competencia con un conjunto que, en su inmensa mayoría, lo integran muchachos de la categoría cadetes.
Samuels también se refirió a la merma de su team en cuanto a fogueo competitivo, pues solamente pudieron pactar tres partidos frente a la selección de Argentina -tres derrotas-. Al final de su intervención, el director del equipo Cuba se mostró esperanzado al aclarar que el conjunto asumirá este reto con muchas ganas e ímpetu y que, por todos los medios posibles, tratarán de al menos alcanzar la victoria en uno de los dos partidos de este fin de semana.
