¿Cómo es la vida diaria de una competencia extrema de mountain bike? ¿Qué detalles hacen de la cotidianidad un recuerdo también al límite?
Desde las cinco de la mañana ya se nota el movimiento en los campamentos de la Titan Tropic by Gaes en el Occidente cubano. Lo mismo en las cabañas cercanas a los Baños del Río San Juan en Las Terrazas, el descampado aledaño al Orquidiario de Soroa o la Finca San Vicente en Viñales, hay detalles que se han repetido día tras día en este novedoso circuito, organizado por la empresa española RPM Events.
Muchos de los pedalistas prefieren madrugar, controlar su tiempo al dedillo y evitar sorpresas antes de la salida rumbo a los diversos recorridos. Otros son más perezosos, aunque igualmente salen de sus cabañas más temprano que tarde, a fin de cuentas, dormir en las noches tropicales en casas de campaña no es tan sencillo como parece.
“En Las Terrazas y en Soroa nos mojamos, pasamos un par de noches para el olvido, no paró de llover, y aunque las tiendas son impermeables siempre les entra agua, además, el sonido de la lluvia cayendo es molesto. Las noches no son tan buenas, al menos para nosotros que corremos decenas de kilómetros en bici a primera hora”, expresó poco después de levantarse el colombiano Diego Alejandro Tamayo.
“La lluvia ha sido incómoda, pero veníamos mentalizados a un país tropical, como en el desierto vamos preparados para otras condiciones. Si te soy sincero no me hubiera gustado que lloviera tanto, pero se ha aguantado bien, como organización ha sido una primera experiencia y de cara a los próximos años tendremos que preocuparnos por mejorar algún servicio para que los aguaceros nos hagan el menor daño posible”, nos comentó Félix Dort, director general de RPM Events y principal figura en los campamentos.
Como es lógico, hay detalles por mejorar después de una vivencia inicial, pero Juan Porcar, consejero delegado de RPM Events y creador de la Titan Tropic Cuba, destacó que la logística ha funcionado muy bien, con gran apoyo de las autoridades cubanas. “Lejos de tener dudas sobre su capacidad solo podemos darles las gracias por el trabajo que han hecho, no hay ninguna queja, todo lo contrario”, precisó.
“Lo mejor que tienen los campamentos es que todo es parejo, todos disfrutan de las mismas facilidades y sufren las mismas necesidades, no creo que haya quejas por estar aquí”, comentó el vasco Ibón Zugasti, quien ha viajado a Cuba con un grupo de camarógrafos y fotógrafos que siguen sus pasos por cualquier lugar.
Justo ese detalle se repite una y otra vez en los campamentos de la Titan Tropic Cuba, pues también el carismático Josef Ajram o el actor Santi Millán disponen de un grupo que busca pormenores y los inmortaliza en grabaciones o fotografías en los más remotos parajes.
Pudiera decirse que estos equipos de técnicos y cámaras corre la Titan Tropic casi a la par que los ciclistas, pues deben internarse en los tupidos bosques, luchar contra la vegetación, mojarse en los ríos para obtener la mejor toma, y concluir cada jornada envueltos en lodo y completamente extenuados.
De cualquier forma, la convivencia en las inmediaciones de las tiendas de campaña ha sido uno de los detalles distintivos de la lid, pues se produce el contacto e intercambio entre profesionales y amateurs, hombres y mujeres, jóvenes y experimentados.
“Esta idea de los campamentos la traemos desde la Titan Desert de Marruecos, donde ha funcionado a la perfección. Aquí todo el mundo hace cola para comer, para ir al lavabo, es decir, todos vivimos en las mismas condiciones y eso crea grupo”, nos comentó Félix Dort, al término de uno de los briefing diarios, espacios en los que se comentan asuntos de las etapas, se dan a conocer los vencedores oficiales y los deportistas disfrutan de videos y música cortesía de PMM.
Estos contactos en los campamentos son habituales, entre los servicios médicos, los staff técnicos y los mecánicos, quienes son una parte importante de la carrera.
“Los mecánicos ofrecen servicios al participante desde hace mucho tiempo, En la primera edición de la Titan Desert no lo tuvimos, pero después se han hecho habituales y cada vez su despliegue es mayor, tanto que ahora tenemos en Cuba a los cuatro servicios de ese tipo más importantes de España: Tomas Bellés, Probike, Más que bici y Doctore Bike”, precisó el propio Dort.
Con semejante despliegue, casi 200 personas conviven en los campamentos, ubicados todos en Reservas Naturales de la Biosfera y Patrimonios de la Humanidad como Las Terrazas, Soroa y Viñales, por lo que sale a colación un tema muy sensible como es el cuidado y respeto al medio ambiente.
“Somos muy cuidadosos en el tema del impacto que puede causar una carrera como la nuestra en la naturaleza, tratamos de reducirlo al mínimo, aunque no podemos decir que no exista. Por ejemplo, en Viñales hicimos roderas con los coches porque el terreno estaba muy mojado, pero gracias a la vegetación de aquí se regenerará rápido. Fuera de eso, nos preocupamos mucho por colocar papeleras y contendores de basura, alrededor de cien por cada campamento”, sostuvo Dort.
“Queremos agradecer a Cuba por dejarnos hacer campamentos en estas zonas tan sensibles y esperamos que de verdad el impacto haya sido el menor posible para regresar y continuar descubriendo sitios espectaculares”, concluyó.