Redacción OnCuba
La Policía brasileña arrestó este jueves en el estado de Minas Gerais a un cubano que acusan de haber asesinado al socio de una galería de arte de Nueva York.
En una entrevista con una radio local, el director del Departamento de Homicidios de la Policía Civil de Río de Janeiro, Felipe Curi, confirmó que el sospechoso se nombra Alejandro Triana Trévez y tiene 30 años.
A Polícia Civil prendeu nesta quinta-feira (18) o suspeito de matar o galerista Brent Sikkema. O cubano Alejandro Triana Trevez, de 30 anos, foi encontrado fugindo na BR-050, nesta madrugada, em Uberaba (MG). O galerista foi encontrado morto na segunda-feira (15) dentro de sua… pic.twitter.com/T9gfnhZRGQ
— GloboNews (@GloboNews) January 18, 2024
El detenido, sobre el que pesa una orden de prisión provisional por “robo seguido de muerte”, según Efe, fue localizado en una gasolinera situada entre las ciudades de Uberlândia y Uberaba.
Según esta información de la Policía de Río, Triana Trévez estaba en posesión de varios miles de dólares.
El cubano se habría desplazado desde São Paulo hasta Río de Janeiro para cometer el asesinato del galerista llamado Brent Sikkema. Habría estado vigilando su domicilio durante 14 horas.
Después, apunta el informe, regresó a la ciudad paulista y se trasladó hasta el estado vecino de Minas Gerais, donde fue capturado.
La Comisaría de Homicidios de Río explicó que las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad a la salida del domicilio de Sikkema facilitaron su identificación. Fue detenido con la colaboración de la Policía Federal de Carreteras y la Policía Civil de São Paulo.
El cuerpo del copropietario de la galería Sikkema Jenkins & Co., de 75 años, fue hallado en la noche del lunes por miembros del Cuerpo de Bomberos de Río en un apartamento de su propiedad.
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El hecho sucedió en el barrio de Jardín Botánico, en la zona sur de Río.
Varios medios de prensa destacan que Sikkema fundó su galería en 1991 con el nombre de Wooster Gardens, una referencia a su localización original en Nueva York, pero en 1999, con nuevos socios, la trasladó a una nueva sede mayor y mejor ubicada en la misma ciudad estadounidense.
