El órgano electoral de Bolivia anunció este viernes los resultados que le dan una victoria en primera vuelta al mandatario Evo Morales, reelecto como presidente tras las elecciones del pasado domingo, pero con el margen más estrecho desde su primer triunfo en las urnas en 2005.
Morales celebra su cumpleaños 60 con el 47,08 % de los votos, como líder del Movimiento al Socialismo (MAS), frente al 36,51 del opositor Carlos Mesa, de la alianza Comunidad Ciudadana, una victoria que no reconoce la oposición boliviana ni parte de la comunidad internacional.
La diferencia del 10,57 % le fue suficiente para ganar en primera vuelta, con solo un 0,57 de margen, alejado de los resultados más amplios en las urnas, cuando en 2005 alcanzó la presidencia con el 53,72 % ; el 64,22 % en 2009 y del 63,36 % en 2014.
La ley electoral exige el 50 % de los votos más uno o el 40 con 10 puntos de ventaja sobre el segundo para vencer en primera vuelta, pero cuando no se logran estos porcentajes, se va a segunda ronda entre los dos más votados.
Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea, Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos, son algunas de las organizaciones mundiales y países de la región que reclaman una segunda vuelta para despejar las sospechas de fraude, una opción que el líder indígena aseguró estaría dispuesto a enfrentar.
Este sábado Morales invitó a los cancilleres de Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos a visitar el país para hacer una auditoría de los votos en los comicios generales y señaló que si se verifica el fraude, convocará a una segunda vuelta.
“Invito a cancilleres de Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos que vengan, hagamos una auditoría voto por voto, mesa por mesa, alcaldía por alcaldía, departamento por departamento y voy a acompañar, y si hay fraude, al día siguiente convocamos a la segunda vuelta”, expresó Morales.
Además, agregó, “nunca ocultamos nada y nunca hemos hecho fraude”, al momento de advertir de que la oposición boliviana, a su juicio, no presenta pruebas sobre el supuesto fraude electoral.
“Lo único que quieren es cómo perjudicar a Bolivia”, refirió Morales.
Desde que el pasado lunes se produjo un repentino cambio en los resultados provisionales del órgano electoral, que auguraban segunda ronda el domingo tras las votaciones, estuvieron durante horas detenidos y de repente preveían el triunfo de Morales en primera.
La polémica se desató luego de que la noche del domingo 20, después de las votaciones el tribunal emitió a través de un sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) un conteo que con cerca del 83,7 % daba a Morales el 45,28 % y el 38,16 % al exmandatario Carlos Mesa, lo cual suponía una segunda vuelta por ser los dos más votados pero sin alcanzar el 50 % más uno o el 40 % con diez puntos de diferencia.
Sin embargo, este recuento preliminar, no oficial, se detuvo y no se reanudó hasta la noche del lunes con el 95,22 % escrutado, dando el 46,86 % al presidente y el 36,73 % al opositor, con lo que el mandatario evitaba segunda ronda por unas décimas. Desde entonces los paros, marchas y concentraciones de protesta se han mantenido toda la semana y están previstos de nuevo durante esta jornada en las principales ciudades del país.
Evo Morales es el primer presidente indígena salido de las urnas en Bolivia, algo poco frecuente en la historia en toda América Latina, y el que más tiempo lleva en el poder en la historia de su país, mientras su opositor Carlos Mesa presidió Bolivia desde 2003 hasta su renuncia en 2005 en medio de una grave convulsión social.
EFE / OnCuba