Durante una conferencia de prensa con el presidente Alejandro Giammattei celebrada hoy lunes en Ciudad de Guatemala, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, le dijo a los guatemaltecos: “No vengan. No vengan”. “Estados Unidos continuará haciendo cumplir nuestras leyes y asegurando nuestras fronteras”.
Sus declaraciones estuvieron en línea con lo que otros funcionarios de la administración Biden han tratado de transmitir durante meses ante el sostenido flujo de personas que intentan ingresar a Estados Unidos por la frontera sur. Sin embargo, el problema ha persistido, convirtiéndose en una de las críticas más frecuentes de los republicanos al presidente Joe Biden durante sus primeros cinco meses en funciones.
También constituye uno de los problemas políticos que se le han encomendado a Kamala Harris mientras busca forjarse un papel influyente para sí misma dentro de la Casa Blanca. :Hay métodos legales mediante los cuales la migración puede y debe ocurrir”, dijo. “Así que desanimemos a nuestros amigos, vecinos y familiares de embarcarse en un viaje extremadamente peligroso”.
“Esta es una de nuestras más altas prioridades, y vine para estar aquí sobre el terreno y para hablar con el líder de esta nación sobre lo que podemos hacer de una manera significativa, tangible y con resultados reales”, expresó. Harris dijo que los funcionarios estadounidenses “tienen buenas razones para creer que podemos tener un impacto” al abordar los problemas en Guatemala y de otros países en la región.
Al mismo tiempo, la Casa Blanca ha buscado manejar las expectativas de lo que se logrará en los dos días de gira de Harris por Guatemala y México, un viaje que se demoró durante varias horas el domingo debido a problemas mecánicos con el Air Force Two, que obligaron a la vicepresidenta y a su delegación a cambiar de avión.
Harris también habló sobre los planes de la administración de Biden para compartir vacunas contra la COVID-19 con Guatemala y otros países, así como sobre la necesidad de “dar a la gente un sentido de esperanza” de que las condiciones pueden mejorar.
El Departamento de Justicia anunció la formación de un grupo de trabajo sobre la trata de personas, la corrupción en México y los llamados países del Triángulo Norte: Guatemala, El Salvador y Honduras. “Entendemos que se trata de un crimen internacional”, dijo Harris. “Tenemos que seguir el dinero y tenemos que detenerlo, y eso es lo que pretendemos hacer”.
Después de concluir su visita de trabajo a Guatemala, Harris tiene programado reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador de México, entre otras actividades.