El ultraderechista José Antonio Kast confirmó lo que avizoraban las encuestas y ganó este domingo la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Chile.
En su tercer intento por llegar al palacio de La Moneda, Kast logró una amplia victoria sobre la candidata de la coalición de centro-izquierda, la comunista Jannette Jara.
De acuerdo con los resultados oficiales preliminares, el fundador del Partido Republicano se impuso en las 16 regiones del país y obtuvo el 58,1 % de los votos, por encima del 48,1 % de su rival, quien reconoció su derrota y felicitó al vencedor.
Aunque Jara había ganado la primera vuelta de las elecciones un mes atrás, el apoyo recibido por Kast del resto de los candidatos de la derecha y la baja popularidad del actual Gobierno de izquierda de Gabriel Boric, le dieron un margen más que suficiente para triunfar.
De esta manera, el descendiente de alemanes con pasado nazi lleva a la ultraderecha a La Moneda y se convierte en el primer defensor de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1989) en alcanzar el poder tras el retorno de la democracia al país andino, refiere la agencia EFE.
¿Quién es José Antonio Kast, el primer pinochetista en llegar al poder en el Chile democrático?
El líder del Partido Republicano implementará un programa neoliberal de megarecortes y mano dura contra la delincuencia y la migración irregular.https://t.co/huQR5MIbbu
— EFE Noticias (@EFEnoticias) December 14, 2025
Kast y su programa de Gobierno
En su primer discurso tras confirmarse su victoria, Kast aseguró que será “el presidente de todos, sin excepción”, pero, a tono con lo anunciado en su campaña, aseguró que impulsará “un cambio real” en Chile.
El mandatario electo, quien asumirá el poder en marzo del próximo año, prometió “restablecer el respeto a la ley” y dijo que los cambios “comenzarán de inmediato”.
“Sin seguridad no hay paz, sin paz no hay democracia y sin democracia no hay libertad”, expresó Kast, quien hizo campaña a favor de Pinochet en el plebiscito de 1988 sobre su continuidad en el poder, recuerda EFE.
Como “hitos” de su fututa administración mencionó la seguridad, la migración y el progreso económico, aunque avisó que “los resultados no se verán al día siguiente”.

Definido como ultraliberal en materia económica y católico conservador, Katz es partidario de bajar los impuesto, establecer un drástico recorte al gasto público, enfrentar la delincuencia y el narcotráfico a través de la fuerza y expulsar a los migrantes irregulares del país.
Tras su victoria electoral, ha sido felicitado por Gobiernos de la región, incluyendo algunos de signo político opuesto, como Brasil, México y Uruguay.
También por sus ya presumibles principales aliados en el área, como el presidente argentino Javier Milei, el ecuatoriano Daniel Noboa, el paraguayo Santiago Peña y el secretario de Estado de EE.UU, Marco Rubio.












