Japón registró hoy sábado más de 7000 nuevos casos de COVID-19 por primera vez desde el mes de enero, apenas un día después que el país asiático extendiera hasta el final de mayo el actual estado de emergencia.
La capital, Tokio, que debe acoger los JJOO en algo más dos meses y medio, reportó hoy 1121 nuevos casos, su cifra más alta desde el pasado 22 de enero, cuando aún estaba activado el segundo estado de emergencia.
Más de una decena de prefecturas anotaron esta jornada máximos históricos, como la de Aichi (centro), con 575 casos, o la de Hokkaido (Norte), donde se han registrado 403 nuevos contagios.
El país asiático declaró el pasado 23 de abril un tercer estado de emergencia en sus regiones más pobladas para tratar de controlar la subida de contagios.
Trabajadores sanitarios de Japón se oponen a los Juegos Olímpicos
Bajo este nuevo marco se han activado medidas como pedir a bares y restaurantes que no sirvan alcoho, o el imponer la celebración de eventos deportivos o multitudinarios con limitación de aforo a cinco mil asistentes o a la mitad de la capacidad del recinto.
El viernes, ante la persistente escalada se anunció que se prolongará la alerta sanitaria hasta finales de mes en Tokio, Osaka, Kioto y Hyogo, y se incluirá en ella a partir del próximo miércoles a las prefecturas de Aichi (centro) y Fukuoka (sudoeste).