La iniciativa es del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), parte de la coalición liderada por Angela Merkel. El proyecto prevé que el Estado proporcione fondos a la pornografía feminista. Quieren luchar “contra los estereotipos transmitidos por la pornografía clásica”.
Con el fin de difundir imágenes más en línea con la realidad, el ala joven del SPD ha propuesto: “los y las jóvenes que ven pornografía tienen una imagen completamente distorsionada de la mujer, en esa industria es vista completamente como un objeto. En la pornografía feminista, en cambio, existe la idea de representar al sexo tal como es, de manera realista “, escribió en Twitter Heike Hofmann, integrante del SPD y una de las mentoras del proyecto.
“En el porno feminista hay mucha más diversidad sexual, diferentes cuerpos, edades y colores de diferentes pieles. Y también existe el desafío de mostrar a las personas protegiéndose con un condón”, completó.
La idea de este proyecto surgió durante el evento Feminismus & Pornography, organizado con actores y actrices del mundo de la pornografía feminista en el otoño de 2017 en Berlín. Allí es donde Heike Hofmann y sus homólogos del partido descubrieron el potencial de este poco conocido género de la pornografía.
El objetivo del proyecto estatal será ayudar a ofrecer a los jóvenes una “alternativa a la pornografía clásica”, una con “fines educativos”.
“Si queremos que funcione, debe ser de acceso abierto. Porque en Internet, muchas películas porno son gratuitas, y los usuarios de Internet, especialmente los menores de edad, acuden a eso”, subrayó Hofmann.
Además del financiamiento estatal para la pornografía feminista, el proyecto busca que las producciones pornográficas respeten las condiciones de trabajo de sus elencos. El SPD, demás, intentará que el porno feminista se emita por canales de televisión públicos .
En Alemania, según la consultora Netzsieger, el 40 por ciento de los menores de 18 años ya han buscado en línea contenido pornográfico. Un estudio resaltó que “la confrontación con tales imágenes, incluso cuando se desarrolla la sexualidad psíquica, puede provocar ataques de ansiedad, trastornos del sueño, alimentar un doloroso sentimiento de culpa y conducir a una representación distorsionada o desviada del amor y el sexo”.
Fuente: Slate.fr