El presunto asesino de la congresista estatal demócrata Melissa Hortman y su esposo, muertos a tiros en la madrugada del sábado en Minnesota, fue arrestado luego de una intensa búsqueda policial.
El sospechoso, nombrado Vance Luther Boelter, se rindió este domingo a los oficiales que lo localizaron en un bosque cerca de su casa, informa la agencia de prensa AP.
De acuerdo con las autoridades, Boelter, de 57 años, también disparó contra el senador estatal John Hoffman y su esposa, quienes resultaron heridos. En consecuencia, fue acusado de dos cargos de asesinato y otros dos de intento de asesinato tras su captura, confirma el reporte.
Ambos tiroteos los realizó en las respectivas casas de sus víctimas, a unos 15 kilómetros de distancia entre sí. Para ejecutarlos, se habría hecho pasar por policía y usó una máscara de latex.
Boelter trabajaba para una empresa de seguridad, en la cual se desempeñó como director de patrullas y recibió entrenamiento de personal del ejército estadounidense, según CNN.
Las autoridades consideran que sus ataques responden a motivos políticos.
Capturan a Vance Boelter, sospechoso del asesinato de la legisladora de Minnesota, según AP https://t.co/XIpgzVf10m
— CNN en Español (@CNNEE) June 16, 2025
El hombre, de quien también se refiere que es predicador, había actuado solo y llevaba consigo una lista con los nombres de una decena de legisladores demócratas y defensores del derecho al aborto que supuestamente eran objetivos a los que pretendía atacar.
Su búsqueda ha sido la mayor cacería humana en la historia del estado, de acuerdo con Mark Bruley, jefe de policía de Brooklyn Park, donde se encuentra la vivienda de Hortman. La búsqueda involucró a centenares de agentes del orden locales, estatales y federales.
Tras el arresto del presunto asesino, el gobernador demócrata Tim Walz dijo que sus “acciones impensables” habían “alterado el estado de Minnesota” y agradeció a las fuerzas de seguridad: “Han salvado vidas”.
Hortman, de 55 años, era presidenta de la Cámara de Representantes estatal y una de las figuras más influyentes de la política local, reconocido por su defensa del medioambiente, los derechos laborales, la igualdad de género y la educación pública.
Sobre ella, el gobernador Walz apuntó que “moldeó el núcleo de lo que somos como estado”, al tiempo que llamó a no dejar “que el miedo gane”.
“Debemos avanzar en honor a Melissa con comprensión, servicio, y, por encima de todo, con humanidad”, refirió.
Si el atacante es declarado culpable por el asesinato de Melissa Hortman y su esposo, puede recibir una sentencia máxima de hasta 40 años por cada cargo, con un mínimo de tres años, según la denuncia citada por los despachos noticiosos.