Joe Biden logró este jueves una victoria dentro de su partido al conciliar dos posturas antagónicas, no necesariamente excluyentes pero divisorias.
Ka cosa consiste en aprobar su presupuesto de 1.75 billones de dólares a fin de llevar a cabo su programa nacional de refuerzo e implementación de su paquete de restructuración de la infraestructura nacional, algo que permitirá le reconstrucción del país a nivel global. Puentes, autopistas, presas, aeropuertos….
“Es un marco económico histórico”, dijo Biden en un discurso antes de volar a Roma, Italia, para participar en la cumbre anual el G-20, que reúne a las veibte mayores economías mundiales.
Los comentarios de Biden en la Casa Blanca se produjeron después de que se desplazara al Capitolio para presentar el caso a los demócratas de la Cámara de Representantes por el paquete nacional aún sólido, 1.75 billones de dólares en servicios sociales y programas de cambio climático. La Casa Blanca cree que se puede aprobar con un Senado empatado 50-50 y el desempate de la presidenta de la Cámara Alta, la vicepresidenta Kamala Harris.
“Cambiará fundamentalmente la vida de millones de personas para mejor”, dijo Biden sobre el acuerdo, que deseaba alcanzar antes de las cumbre para mostrar al mundo que la democracia estadounidense todavía funciona. Junto con un proyecto de ley de infraestructura bipartidista de casi 1 billón, que se dirigió a las votaciones finale,, Biden reclamó un logro nacional inspirado en los de Franklin Roosevelt y Lyndon Johnson.
“Necesito sus votos”, le dijo Biden a los legisladores, según una persona que solicitó el anonimato a la agencia AP para discutir los comentarios privados.
Es cierto que Biden estaba ansioso por llegar a un acuerdo antes de partir a la cumbre mundial. Pero en el mejor de los casos, se iba con un marco mientras los detalles aún se estaban cosiendo. El paquete revisado ha perdido algunas de las principales prioridades. Ha sido el acuerdo posible, lo que ha frustrado a muchos demócratas a medida que las ambiciones del presidente dan paso a las realidades políticas de un Congreso dividido.
El plan incluye una larga lista de otras prioridades: círculos infantiles gratuitos para todos, programas de atención médica ampliados, incluido el lanzamiento de un nuevo beneficio de audífonos de 35 000 millones para personas con Medicare, y 555 000 millones para enfrentar el cambio climático.
También hay una extensión de un año de crédito fiscal para el cuidado de niños que se implementó durante el rescate de Covid-19 y los nuevos subsidios para el cuidado de niños. Un monto adicional de 100 000 millones para reforzar el sistema de procesamiento de inmigración y fronteras podría impulsar el paquete general a 1 850 billones si aprueba las reglas del Senado.
Dado que el apoyo para el paquete reducido sigue siendo un problema, Biden dijo al salir del Capitolio: “Creo que vamos a estar en buena forma”. Pero no detalló.