El presidente Joe Biden recibió en la Casa Blanca al mandatario guatemalteco Bernardo Arévalo.
La reunión “se dio en un ambiente de cordialidad”, indicó la Presidencia de Guatemala. “Conversaron sobre temas de agenda bilateral, la lucha contra la corrupción y la defensa de la democracia, entre otros”.
En la mañana, la vicepresidenta Harris mencionó en una conferencia de prensa conjunta que hay cinco pilares fundamentales en la estrategia estadounidense para frenar la migración irregular desde el sur: invertir en el desarrollo económico en la región, combatir la corrupción y promover la buena gobernanza, respetar los derechos humanos y los derechos laborales, así como reducir la violencia y la violencia de género.
Anunció que Estados Unidos aportará 170 millones de dólares adicionales para la asistencia económica, de salud, desarrollo y seguridad en Guatemala.
“Este trabajo mejorará las vidas y los medios de vida en la región”, dijo.
También recordó que su país apoyó la transición pacífica del nuevo Gobierno ante la arremetida judicial de la fiscalía contra el proceso electoral, contra Arévalo y su partido y contra autoridades y trabajadores electorales.
Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea sancionaron a cinco fiscales, incluida la titular del Ministerio Público, Consuelo Porras, por socavar la democracia de Guatemala y por su intento de frenar la transición.
“Vamos a mantener nuestro compromiso de tener más interacción entre distintos sectores para desarrollar una Guatemala más democrática y próspera, que brinde oportunidades para todos”, dijo por su parte el mandatario centroamericano.
Durante sus tres días de visita en Estados Unidos, Arévalo se reunirá con empresarios, organizaciones sociales, tanques de pensamiento y organizaciones de inmigrantes.