La alcaldía de Miami Beach ha decretado un toque de queda a partir de este domingo luego de dos tiroteos fatales en plenas vacaciones estudiantiles de primavera que, a su vez, han provocado disturbios callejeros. La policía ha tenido dificultades en controlarlos.
La ciudad dijo en un comunicado que el toque de queda sería a partir de las 11:59 pm del domingo hasta las 6 am de este lunes, pero es probable que se establezca un toque de queda adicional desde el jueves hasta el próximo lunes 27 de marzo. La medida afecta principalmente a South Beach, el lugar de esparcimiento más popular de las vacaciones estudiantiles.
Los dos tiroteos del viernes por la noche y la madrugada del domingo dejaron dos muertos y “multitudes excesivamente grandes e incontrolables” y llevaron a tomar la decisión.
El alcalde de Miami Beach, Dan Gelber, dijo en un mensaje de video publicado el domingo que las multitudes y la presencia de numerosas armas de fuego “ha creado un peligro que no puede pasar desapercibido”, a pesar de la presencia policial masiva y de muchas actividades patrocinadas por la ciudad para mantener ocupada a la gente.
“No pedimos vacaciones de primavera en nuestra ciudad. No queremos vacaciones de primavera en nuestra ciudad. Es demasiado ruidoso, es demasiado desorden y es demasiado difícil de vigilar”, dijo Gelber.
Agregó que los funcionarios de la ciudad se reunirán el lunes para discutir el posible toque de queda para el próximo fin de semana y señaló que “los poderes de emergencia del administrador están limitados a solo 72 horas”.
El último tiroteo, que según la policía fue captado en un video de vigilancia, ocurrió alrededor de las 3:30 am del domingo en Ocean Drive, South Beach.
Según la policía explicó a la cadena Local 10, el sospechoso, “sin ninguna provocación”, disparó a la víctima varias veces. Esta murió después de ser trasladada de urgencia al Jackson Memorial Hospital. Una segunda persona resultó herida, pero fue tratada en el lugar y liberada, confirmó la policía.
El sospechoso, identificado como Dontavious Polk, huyó a pie y dejó caer un arma mientras lo perseguía un oficial de policía, según el informe del arresto. La policía recuperó el arma que, constataron, fue robada, y arrestó al sospechoso después de que los agentes lo abordaran a unas cuadras de distancia.
Después del arresto el sospechoso fue llevado al Ryder Trauma Center por lo que la policía describió como una “herida de bala preexistente”. Más tarde fue dado de alta y llevado al Centro Correccional Turner Gilford Knight, cerca del aeropuerto de Miami.
Polk enfrenta ahora un cargo de asesinato en primer grado, según los registros policiales, aunque no se habían presentado cargos oficialmente hasta el domingo por la noche.
La policía de Miami Beach ha confirmado que fue un incidente no premeditado y al azar. Las identidades de todas las partes no pueden ser reveladas mientras la investigación esté en curso, dijeron.
En el tiroteo del viernes por la noche, una víctima masculina murió y otra resultó gravemente herida, lo cual provocó que las personas salieran asustadas de los restaurantes y clubes a las calles mientras sonaban disparos. La policía detuvo a un individuo en el lugar y encontró cuatro armas de fuego, pero no se han dado más detalles.
Bajo el toque de queda, las personas deben abandonar los negocios antes de la medianoche, aunque los hoteles pueden operar hasta más tarde solo en servicio a sus huéspedes. El comunicado de la ciudad dijo que los restaurantes pueden permanecer abiertos solo para entregas y que el toque de queda no se aplicará a los residentes, las personas que van y vienen del trabajo, los servicios de emergencia y los huéspedes del hotel. Algunas calles estarán cerradas y es posible que los huéspedes de hoteles que quieran ingresar tengan que mostrar un comprobante de sus reservas.
El año pasado, también durante las vacaciones de primavera, la ciudad impuso un toque de queda a medianoche luego de dos tiroteos, también en Ocean Drive. El año anterior, hubo alrededor de 1 000 arrestos y docenas de armas fueron confiscadas.