Mientras todavía se desarrollan las actividades del primer día de Donald J. Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos, su primer discurso después de jurar en el cargo ya encuentra resonancias dentro y fuera de la Unión.
A continuación, retomamos 7 de los principales temas que abordó; la mayor parte de ellos, con contenido propagandístico, inexacto o directamente falso.
1. “La Edad Dorada”
Con su acostumbrado tono tremendista y mesiánico, Donald Trump declara que la “Edad Dorada de Estados Unidos comienza ahora”, argumentando que el país florecerá y “será de nuevo respetado en todo el mundo”. Retomando su eslogan de base, Trump prometió “poner a Estados Unidos primero”, restaurar su soberanía, seguridad y justicia (supuestamente perdidas), y crear una nación orgullosa, próspera y libre.
Pronto Estados Unidos será más grande, más fuerte y mucho más excepcional que nunca. Regreso a la presidencia confiado y optimista de que estamos al comienzo de una nueva y emocionante era de éxito nacional, una ola de cambio está arrasando el país, la luz del sol está brillando sobre el mundo entero y Estados Unidos tiene la oportunidad de aprovechar esta oportunidad como nunca antes.
2. Crisis de confianza y acusaciones de corrupción
Critica al Gobierno saliente por la corrupción y la mala gestión de crisis tanto internas como externas, lo cual, afirma, ha debilitado la sociedad y las instituciones estadounidenses:
Durante muchos años, un establishment radical y corrupto ha extraído poder y riqueza de nuestros ciudadanos, mientras los pilares de nuestra sociedad yacían rotos y aparentemente en completo deterioro. (…)
Bajo mi liderazgo, restableceremos una justicia equilibrada, igualitaria e imparcial bajo el imperio de la ley constitucional y devolveremos la ley y el orden a nuestras ciudades [dijo el convicto por 34 cargos criminales].
3. El enemigo indocumentado
Trump asegura que el Gobierno:
no protege a nuestros magníficos ciudadanos estadounidenses respetuosos de la ley, pero sí proporciona santuario y protección a criminales peligrosos, muchos de ellos procedentes de prisiones e instituciones mentales que han entrado ilegalmente a nuestro país desde todas partes del mundo.
Estas líneas coinciden con algunas de las afirmaciones falsas que repitió a lo largo de su campaña, retomando, a su vez, ataques xenófobos de su primer mandato y la campaña previa. Retoma en el discurso la eterna cruzada contra los indocumentados. Afirmó que el Gobierno saliente “ha otorgado fondos ilimitados a la defensa de fronteras extranjeras, pero se niega a defender las fronteras estadounidenses o, lo que es más importante, a su propio pueblo”. Para cambiar este supuesto escenario, Trump anunció que declarará emergencia nacional en la frontera sur, detendrá la entrada ilegal de migrantes y devolverá a esos “criminales extranjeros” a sus países de origen.
Se detendrá inmediatamente toda entrada ilegal y comenzaremos el proceso de devolver a millones y millones de extranjeros criminales a los lugares de donde vinieron. Reinstauraremos la política de permanecer en México. Pondré fin a la práctica de atrapar y liberar. Y enviaré tropas a la frontera sur para repeler la desastrosa invasión de nuestro país.
(…) también designaremos a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras. Y al invocar la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, ordenaré a nuestro Gobierno que utilice todo el inmenso poder de las fuerzas de seguridad federales y estatales para eliminar la presencia de todas las bandas y redes criminales extranjeras que traen delitos devastadores a suelo estadounidense, incluidas nuestras ciudades y centros urbanos. Como Comandante en Jefe, no tengo mayor responsabilidad que defender a nuestro país de amenazas e invasiones y eso es exactamente lo que voy a hacer. Lo haremos a un nivel que nadie ha visto antes.
A la vez, se dirigió “a las comunidades negra e hispana”, para “agradecerles por la enorme muestra de amor y confianza que me han demostrado con su voto”.
4. Servicios básicos y reforma en materia social
Trump apuntó el dedo contra el Gobierno Biden-Harris una vez más cuando aseguró que este no ha sido capaz de gestionar emergencias como los recientes desastres naturales. Afirma que esto cambiará bajo su administración.
Nuestro país ya no puede prestar servicios básicos en tiempos de emergencia, como lo demostró recientemente la maravillosa gente de Carolina del Norte, que ha sido tratada tan mal. Y otros estados que todavía sufren los efectos de un huracán que tuvo lugar hace muchos meses. O más recientemente en Los Ángeles, donde estamos viendo cómo los incendios que se han prolongado trágicamente desde hace semanas siguen ardiendo sin siquiera un signo de defensa. (…)
Tenemos un sistema de salud pública que no responde en tiempos de desastre, pero se gasta más dinero en él que en cualquier otro país del mundo. Y tenemos un sistema educativo que enseña a nuestros hijos a avergonzarse de sí mismos, en muchos casos a odiar a nuestro país a pesar del amor que intentamos tan desesperadamente brindarles. Todo esto cambiará a partir de hoy, y cambiará muy rápidamente.
Anunció que tan pronto como esta semana, podrá fin “a la política gubernamental de intentar introducir mediante ingeniería social la raza y el género en todos los aspectos de la vida pública y privada”. Forjaremos, dijo, una sociedad “que no tenga en cuenta el color de la piel y se base en el mérito. A partir de hoy, la política oficial del Gobierno de los Estados Unidos será que solo existen dos géneros: masculino y femenino”.
5. Misión divina
De nuevo capitalizando políticamente el intento de asesinato que sobrevivió en julio, Trump afirma que su vida fue salvada por Dios por una razón: devolver la grandeza a Estados Unidos. En más de un momento de su discurso, se presentó como un elegido llamado a cumplir grandes misiones por voluntad divina.
Aquellos que desean detener nuestra causa han tratado de quitarme la libertad y, de hecho, quitarme la vida. Hace apenas unos meses, en un hermoso campo de Pensilvania, la bala de un asesino me atravesó la oreja. Pero entonces sentí, y creo aún más ahora, que mi vida fue salvada por una razón. Dios me salvó para hacer que Estados Unidos volviera a ser grande. (…)
Tengo la esperanza de que nuestra reciente elección presidencial sea recordada como la elección más grande y trascendental en la historia de nuestro país. (…)
Y perseguiremos nuestro destino manifiesto hacia las estrellas lanzando astronautas estadounidenses para plantar las estrellas y las barras [referido a la bandera estadounidense] en el planeta Marte. (…)
Mi legado más importante será el de un pacificador y unificador, eso es lo que quiero ser, un pacificador y unificador. Me complace decir que, a partir de ayer, un día antes de que asumiera el cargo, los rehenes en Oriente Medio están regresando a casa con sus familias.
En más de una ocasión, Trump ha reclamado el crédito por el acuerdo de alto al fuego en Gaza.
6. Acción inmediata
Las primeras órdenes ejecutivas del nuevo presidente se esperan tan pronto como hoy mismo. En su discurso anunció que las dos primeras serán la declaración de emergencia nacional en la frontera sur, y de emergencia energética. Asegura que la Administración responderá rápidamente a las crisis “con dignidad, poder y fuerza, devolviendo la esperanza y la prosperidad a todos los ciudadanos”.
Hoy firmaré una serie de órdenes ejecutivas históricas. Con estas acciones, iniciaremos la restauración completa de Estados Unidos y la revolución del sentido común. Todo es cuestión de sentido común.
Aseguró que “dentro de poco”, cambiará el nombre del Golfo de México por el de Golfo de América. Y volvió a referirse al Canal de Panamá:
…se le ha otorgado tontamente al país de Panamá después de que Estados Unidos gastara más dinero que nunca en un proyecto anterior y perdiera 38 mil vidas en la construcción del Canal de Panamá. (…)
A los barcos estadounidenses se les están cobrando de más, se les están cobrando cargos excesivos y no se les está tratando de manera justa de ninguna manera. Y eso incluye a la Marina de los Estados Unidos y, sobre todo, China está operando el Canal de Panamá y no se lo dimos a China, se lo dimos a Panamá y lo vamos a recuperar.
7. Política energética y manufacturera
El nuevo presidente de los Estados Unidos promete restablecer la producción de petróleo y gas en EE. UU., y revitalizar la industria manufacturera del país, dando por canceladas políticas como el Green New Deal, enfocado en la transición ecológica.
Con mis acciones de hoy, acabaremos con el Green New Deal y revocaremos el mandato de los vehículos eléctricos, salvando nuestra industria automotriz y cumpliendo mi compromiso sagrado con nuestros grandes trabajadores automotrices estadounidenses.
Aseguró que la crisis inflacionaria “fue causada por un gasto excesivo masivo y por el aumento de los precios de la energía”, razón por la cual reivindica el paradigma energético de los combustibles fósiles. “Perforaremos, bebé, perforaremos”.