Un equipo de investigación de la fiscalía federal en Manhattan, Nueva York llevó a cabo un registro en la mañana del miércoles en la casa de Rudy Giuliani, al abogado del ex presidente Donald Trump y antiguo fiscal federal en la misma zona. Los agentes ingresaron a la residencia con el permiso de una jueza federal en busca de datos sobre los negocios y contactos, del también ex alcalde de Nueva York, con las autoridades políticas ucranianas.
Giuliani realizó varios viajes a Ucrania en los dos últimos años de la presidencia de Trump en busca de pruebas de negocios ilícitos de Hunter Biden, el hijo del actual presidente Joe Biden, en busca de pruebas de corrupción que pudieran ser usadas durante la campaña electoral. Esa pesquisa aparentemente no dio resultados.
A su vez, Giuliani no ha sido acusado de nada hasta hoy y ha negado haber cometido cualquier delito.
Según el New York Times , es inusual que los fiscales ejecuten una orden de registro contra un abogado, aunque los fiscales federales de Manhattan lo han hecho antes, sobre todo en los últimos años, pero contra otro ex abogado de Trump, Michael Cohen.
El abogado de Giuliani, Robert Costello, no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios del Times o la cadena CNN. Un portavoz de la oficina del fiscal federal de Manhattan, también rehusó comentar sobre la investigación.
Según testigos, los investigadores retiraron de la casa de Giuliani varios dispositivos electrónicos como computadoras y discos de memorias externas.
Esta investigación comenzó antes de las elecciones presidenciales de noviembre pasado, pero el entonces fiscal general adjunto Jeffrey Rosen, junto con otros funcionarios de la secretaria de Justicia decidieron no adelantarse al registro, en parte porque pronto habría un cambio en la administración, confirmó CNN.
Los fiscales federales de Nueva York querían confiscar los dispositivos de Giuliani cuando intentaron por primera vez ejecutar la orden de registro el año pasado. Pero una orden de registro para un abogado como Giuliani necesitaría de la aprobación de los niveles más altos del Departamento de Justicia, quizá de la Fiscal General Adjunta Lisa Mónaco. Al final, desistieron de hacerlo entonces porque la ex fiscal era cercana a la administración de Trump.
Adicionalmente, la investigación ha explorado si Giuliani pudo haber estado involucrado en un cabildeo extranjero no revelado para funcionarios ucranianos cuando buscó la destitución del embajador de Estados Unidos en Ucrania, así como la investigación sobre los Biden.
En 2019, dos asociados de Giuliani, Lev Parnas e Igor Fruman, ambos de origen ucraniano residentes en Florida, fueron acusados de cargos de financiamiento de campaña derivados de un supuesto plan de donación falsa. Parnas y Fruman se reunieron con Giuliani y lo ayudaron a contactar a los funcionarios ucranianos. Ambos se han declarado inocentes.
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