El Gobierno de Estados Unidos entró en parálisis presupuestaria este miércoles, con el consiguiente cierre de parte de la administración federal y sin solución a la vista en el Congreso entre los republicanos del presidente Donald Trump y la oposición demócrata.
Se trata del primer cierre o “shutdown” desde el más largo en la historia hace casi siete años, y por el cual se detendrá el trabajo en múltiples departamentos y agencias federales, afectando a cientos de miles de empleados, apuntan medios como AFP.
Republicanos y demócratas se culpan mutuamente
Trump culpó a los demócratas por el estancamiento y amenazó con castigar al partido y sus votantes con la interrupción de prioridades de la agenda progresista y recortes masivos en el sector público, según la agencia francesa.
DEMOCRAT SHUTDOWN! Their $1.5T radical wishlist—FREE health care for illegals & zero regard for Americans—has slammed the brakes on the U.S. government.
They are holding the nation HOSTAGE to appease their radical left base. This is the DEMOCRATS’ DISASTER. pic.twitter.com/9JPl0TQ5iz
— The White House (@WhiteHouse) October 1, 2025
La amenaza de Trump respecto a recortes de empleos se suma a la ansiedad en el personal federal causada por los despidos iniciados a gran escala del Departamento de Eficiencia Gubernamental (Doge) del exasesor presidencial Elon Musk.
Los dos principales electos demócratas en el Congreso, el jefe de la minoría en el Senado Chuck Schumer y su homólogo en la Cámara de Representantes Hakeem Jeffries, afirmaron en un comunicado conjunto que “Donald Trump y los republicanos cerraron los servicios del Estado porque no quieren proteger la atención médica del pueblo estadounidense”.
“Los demócratas están dispuestos a encontrar un camino bipartidario para reabrir los servicios del Estado de una forma que reduzca los costos(de salud) y responda a la crisis generada por los republicanos”, escribieron.
El vicepresidente J. D. Vance, en tanto, también culpó a los demócratas en una entrevista con Fox News esta mañana de miércoles, cuando hizo sus primeras declaraciones públicas al respecto. “No se toma al Gobierno como rehén porque se quiere negociar sobre los costos de la atención médica. Hagamos esa negociación, pero hagámosla en el contexto de reabrir el Gobierno y garantizar que esos servicios esenciales se brinden al pueblo estadounidense”, dijo Vance.
Los republicanos habían propuesto extender el financiamiento actual hasta finales de noviembre, mientras se negociaba un plan de gasto a más largo plazo. Pero, según la propia AFP, los demócratas querían restituir cientos de miles de millones de dólares en gastos de atención médica, en especial en el programa de seguros de salud denominado Obamacare para hogares de bajos ingresos.
750 000 funcionarios federales en desempleo parcial
Pese a la mayoría republicana en el Senado, el partido de Trump no controla los votos necesarios para aprobar leyes presupuestarias. Estas requieren 60 votos, siete más de los que tienen los republicanos.
Tras el fracaso de una última votación el martes por la noche en el Senado, el director de la Oficina de Presupuesto en la Casa Blanca, Russell Vought, ordenó en una carta a las administraciones federales “poner en marcha sus planes para un cierre ordenado”.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), 750 000 funcionarios federales podrían encontrarse esta vez en situación de desempleo parcial, con una pérdida de ingresos equivalente a 400 millones de dólares. El tráfico aéreo podría verse afectado, mientras que el pago de algunas ayudas sociales quedaría fuertemente perturbado.
Los parques nacionales quedarán privados de sus guardaparques, en un periodo del año en que millones de turistas viajan por Estados Unidos para disfrutar el espectáculo del cambio de colores de la hojas de los árboles por la llegada del otoño boreal.
Según los cálculos de los analistas de la compañía de seguros Nationwide, cada semana de cierre podría reducir el crecimiento del PIB de Estados Unidos en 0,2 puntos porcentuales.
14 interrupciones desde 1981
Según CNN, desde 1981 han habido 14 interrupciones en el financiamiento federal. La mayoría ocurrieron con un Gobierno dividido, cuando la Casa Blanca, la Cámara de Representantes y el Senado no estaban controlados por un mismo partido.
Encuesta: 54 % de los votantes desaprueban la gestión de Trump
El último cierre, ocurrido de diciembre de 2018 hasta finales de enero de 2019, durante el primer mandato de Trump, duró 35 días. En ese momento, la CBO estimó que había reducido el Producto Interno Bruto (PIB) en 11 000 millones de dólares.
Estas parálisis por falta de presupuesto son muy impopulares en Estados Unidos, y tanto demócratas como republicanos intentan evitarlas, a veces hasta último momento. Más aún cuando las elecciones legislativas de mitad de mandato, en noviembre de 2026, está en juego la mayoría en el Congreso, apunta la agencia francesa.