La administración Biden lanzó hoy jueves un nuevo programa piloto para permitir que estadounidenses comunes patrocinen a refugiados a fin de que se establezcan en Estados Unidos.
El programa del Departamento de Estado, llamado Welcome Corps, reclutará inicialmente a 10 000 estadounidenses que podrán patrocinar hasta 5 000 refugiados de todo el mundo.
“Durante más de cuatro décadas, nuestro sistema se ha basado principalmente en las agencias de reasentamiento [para el reasentamiento de refugiados]”, dijo el secretario de Estado Antony Blinken.
“Bajo esta nueva iniciativa, las personas en las comunidades, las organizaciones religiosas, los colegios y universidades, las asociaciones de veteranos y otros grupos podrán desempeñar ese papel: tomar la iniciativa para ayudar a los refugiados a encontrar un lugar para vivir, inscribir a los niños. en la escuela [y] obtener bienes básicos como muebles y ropa de invierno”, enfatizó.
La expansión nacional del programa de refugiados se corresponde con la política de inmigración más amplia de la administración Biden de expandir las vías legales para los inmigrantes y desincentivar los cruces fronterizos.
Pero la inclusión de grupos de la sociedad civil también responde a antiguas demandas de activistas que desde hace mucho tiempo han querido desempeñar un papel más importante en la acogida de inmigrantes.
Los grupos que alimentan el sentimiento de base del Partido Republicano en contra de la inmigración han criticado otras iniciativas similares de Biden. “En lugar de tratar de detener un flujo de inmigrantes sin precedentes, están fomentando solicitudes de asilo aún más fraudulentas, mientras encuentran formas innovadoras de procesarlas en masa”, dijo RJ Hauman, portavoz de la Federación para la Reforma de la Inmigración Estadounidense (FAIR, por sus siglas en inglés) en respuesta al lanzamiento de un programa similar anunciado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) a principios de este mes.
Washington prácticamente ha renunciado a una solución legislativa. Ni siquiera un Congreso demócrata pudo ponerse de acuerdo sobre una propuesta de reforma migratoria. Y con el control republicano de la Cámara, las perspectivas para esa reforma migratoria son nulas
La expansión del programa de refugiados más allá de unas pocas organizaciones sin fines de lucro financiadas con fondos federales también podría servir para distribuir los costos iniciales de incorporar nuevos inmigrantes en todo el país.
El programa privado de patrocinio de refugiados se hace eco de uno que ya existe en Canadá, donde ha sido tremendamente exitoso. Este modelo de patrocinio surge cuando Estados Unidos ha estado muy lejos de alcanzar sus objetivos anuales de admisión de refugiados en los últimos años.
Bajo el programa de admisión de refugiados, creado en 1980, las administraciones presidenciales establecen los llamados “techos de refugiados” o el número de refugiados que pueden ser admitidos en el país.
El expresidente Donald Trump redujo el límite máximo de admisión de refugiados de 85 000 en el año fiscal 2016, el último año establecido durante la administración de Obama, a 30 000 en el año fiscal 2019 y a solo a 18 000 en el año fiscal 2020.
La administración Biden ha establecido un techo de refugiados de 125 000 para los años fiscales 2022 y 2023, pero ha tenido problemas para cumplir esos objetivos, citando insuficientes recursos diezmados.
Estados Unidos acogió a menos de 26 000 refugiados en el año fiscal 2022, que finalizó en septiembre. Biden ha vuelto a anunciar el objetivo de acoger a 125 000 refugiados este año fiscal, pero Estados Unidos acogió a menos de 7 000 refugiados durante los primeros tres meses del año fiscal, según datos del gobierno.