Gregory Erickson, el abogado de Derek Chauvin, el oficial de policía de Minneapolis condenado por el asesinato de George Floyd, dijo hoy que pudo hablar con funcionarios de la Oficina Federal de Prisiones después de que su cliente fuera apuñalado en una prisión federal. Le informaron que su salud es “decente y está mejorando”.
En abril de 2021, Chauvin fue declarado culpable de asesinato involuntario en segundo grado, y de asesinato en tercer grado y homicidio involuntario en segundo grado. Fue condenado a 22 años y medio de prisión. Meses después, se declaró culpable de los cargos federales de privar a Floyd de sus derechos civiles y fue sentenciado a 21 años de prisión.
Chauvin se arrodilló sobre el cuello y la espalda de Floyd durante más de 9 minutos el 25 de mayo de 2020, después de que los agentes respondieran a informes que sospechaban que Floyd había usado 20 dólares falsos en una tienda de Minneapolis.
Floyd, un afroamericano de 46 años, estaba esposado y tendido boca abajo en la calle y alegaba que no podía respirar.
Condenan a 22 años y medio de prisión a Derek Chauvin, el expolicía que asesinó a George Floyd
Su muerte provocó protestas masivas en todo el país y el mundo por la forma como la policía trata a los afroamericanos.
Chauvin fue apuñalado el pasado viernes por la tarde en una institución correccional federal de Tucson, Arizona, de seguridad media. Fue trasladado a un hospital para recibir tratamiento.
“Era un hombre muerto caminando en su primer día en prisión”, advirtió Keith Rovere, exministro de prisiones que habla regularmente con decenas de reclusos en todo el país. “Este, definitivamente, no será el último ataque”. De hecho, dijo, “le sorprendió que tardara tanto. Las pandillas carcelarias tienen como objetivo notorio a prisioneros de alto perfil”, dijo, y “Chauvin se encuentra entre los expolicías tras las rejas más infames del país. Y no es exactamente una pelea justa: van a esperar que estés solo o que les des la espalda”, añadió
Su abogado dijo que el expolicía siempre había estado preocupado por su seguridad al ingresar en sistema penitenciario. En el futuro, el equipo legal y la familia de Chauvin, enfatizó, “necesitarán recibir algún tipo de garantía de que lo que pasó no puede volver a suceder”.