El ex secretario de Estado Rex Tillerson dijo ayer jueves por la noche que su relación con el presidente Trump se puso tensa después de hacerle saber en repetidas ocasiones que muchas de las cosas que le estaba pidiendo hacer eran ilegales.
“Muy a menudo, el presidente me decía: ‘Esto es lo que quiero que hagas, y así es como quiero que lo hagas’” –dijo Tillerson en una recaudación de fondos para el MD Anderson Cancer Center en Houston, sus primeras declaraciones públicas desde que Trump lo despidió en marzo.
“Y tenía que decirle: ‘Señor presidente, entiendo lo que quiere hacer. Pero no puede hacerlo de esa manera. Viola la ley'”.
“Yo diría: ‘Esto es lo que podemos hacer. Podemos regresar al Congreso y hacer que se cambie esta ley. Y si eso es lo que quiere hacer, no hay nada de malo en eso’. Le dije: ‘Estoy listo para ir allí y pelear, si eso es lo que quiere hacer'”.
Mike Pompeo is doing a great job, I am very proud of him. His predecessor, Rex Tillerson, didn’t have the mental capacity needed. He was dumb as a rock and I couldn’t get rid of him fast enough. He was lazy as hell. Now it is a whole new ballgame, great spirit at State!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de diciembre de 2018
“Creo que parte del problema fue que, obviamente, somos muy diferentes en nuestros estilos. No teníamos un sistema de valores común “, le dijo Tillerson al veterano periodista Bob Schieffer, de CBS News.
“Se frustró mucho. Creo que se cansó de que yo fuera el tipo que todos los días que le dijera ‘usted no puede hacer eso, hablemos de lo que podemos hacer’”.
Tillerson fue despedido unas horas después de regresar de un viaje a África. Aunque se le advirtió que Trump no estaba contento con él, se enteró de su despido mediante un tuit en el que el presidente felicitó a su nueva elección como secretario de Estado, Mike Pompeo: “¡Gracias a Rex Tillerson por su servicio!”.
Trump acaba de reaccionar en un tuit a los comentarios del ex secretario de Estado: “Mike Pompeo está haciendo un gran trabajo, estoy muy orgulloso de él. Su predecesor, Rex Tillerson, no tenía la capacidad mental necesaria. Era tonto como una roca y no podía deshacerme de él lo suficientemente rápido. Era perezoso como el infierno. ¡Ahora es un juego de pelota completamente nuevo!”.