Redacción OnCuba
Una multitud de seguidores de QAnon se reunieron en el centro de Dallas, Texas, hoy martes con la esperanza de que los miembros muertos de la familia Kennedy reaparezcan y declaren a Donald Trump el legítimo presidente de Estados Unidos.
El desfile de personas comenzó el lunes por la noche y el martes llegó a alcanzar varios cientos. Disminuyó con la lluvia, pero todavía hubo algunos esperando un espectáculo mesiánico de políticos muertos que, aludidamente, venían a salvar a Estados Unidos.
Se reunieron en AT&T Discovery District Dealey Plaza, donde el presidente John F.Kennedy fue asesinado en 1963. Según publicaciones relacionadas con QAnon, John F. Kennedy (padre), John F. Kennedy (hijo) y Jackie Kennedy Onassis regresarán de la muerte para apoyar el reclamo de Trump a la presidencia antes de la medianoche de hoy martes.
“JFK será traído de regreso y mostrado al mundo el 2 de noviembre en Dallas, donde le dispararon desde el césped no el [sic] en Deily Plaza [sic]”, sostuvo una publicación. “JFK le transferirá el poder a Donald Trump y JFK será el vicepresidente de Trump”.
La publicación también sostuvo que el evento será la “segunda venida de Cristo” porque la familia Kennedy tiene “el linaje de Jesús”. Además, el mundo volverá a usar el calendario juliano, haciendo que la fecha sea el 20 de octubre.
De acuerdo con reportes de prensa, los participantes no hablaban con los reporteros, acusándolos de formar parte de los “medios de comunicación falsos”. Varios periodistas locales dijeron que algunas de las personas reunidas simplemente apoyaban a Trump y no estaban unificadas sobre lo que esperaban, si es que esperaban algo, de la familia Kennedy.
Pastor fundamentalista sostiene que Trump asumió la presidencia el pasado 4 de marzo
QAnon es un movimiento de ultraderecha originado en los foros de mensajes de 4chan, en octubre de 2017, con publicaciones de una persona anónima que se firmaba con una “Q”. Dijo entonces ser un funcionario del gobierno con autorización de inteligencia ultrasecreta que descubrió, supuestamente, una serie de complots del “Estado profundo” y conspiraciones, incluida una red de traficantes sexuales que incluye a políticos demócratas, líderes empresariales y élites de Hollywood.
La creencia de que las elecciones de 2020 le fueron robadas a Trump es parte de esa conspiración.
