Una jueza de Miami Dade condenó este viernes al actor mexicano Pablo Lyle a cinco años de cárcel y ocho de libertad condicional, además de asistir a clases de control de ira y trabajo comunitario.
La fiscalía aspiraba a una pena entre 9 y 15 años de cárcel. El actor fue hallado culpable por un jurado en octubre pasado.
Lyle, de 36 años, fue acusado de homicidio involuntario por el incidente, clasificado de ira al timón y ocurrido en marzo de 2019. Le dio un puñetazo a un cubano de 63 años, Juan Ricardo Hernández, que le provocó la muerte.
El hecho ocurrió cuando el actor se dirigía al aeropuerto en compañía de su familia. En una intersección el cuñado de Lyle, al parecer, hizo una maniobra equivocada que molestó a Hernández. El cubano salió de su auto, golpeó la ventanilla, el mexicano se bajó del suyo y le dio un golpe en el rostro a Hernández, quien cayó al suelo, se dio en la cabeza y murió cuatro días después.
Aunque la jueza Marisa Tinkler fue generosa, una declaración previa suya hizo que algunos presagiaran una condena más fuerte. “Tendrá que ser responsabilizado por esto. El señor Lyle que se tome su tiempo para entender lo que se ventiló en este tribunal. La vida del señor Lyle no ha terminado. La vida del señor Hernández se ha perdido”, subrayó.
El informe forense indica “homicidio” en el caso de Pablo Lyle
Durante la primera parte de la audiencia, la jueza escuchó a familiares de Lyle hablando sobre su comportamiento como parte de la familia y sobre cómo le había afectado la muerte de Hernández. “Es un buen hombre”, dijo su hermana, visiblemente emocionada.
Se refirieron al hecho como un lamentable incidente que se convirtió en una tragedia para las dos familias.
También habló su esposa, Ana Araujo, quien se refirió a la reacción de Lyle cuando se enteró que el señor Hernández había fallecido. “Pasó el día vomitando, llorando, no podía dormir”, dijo.
La esposa se refirió a Lyle como un “corazón con patas”, del que dijo sentirse orgullosa. Señaló el remordimiento que sintió por lo ocurrido. En la audiencia, el actor pidió perdón a la familia Hernández y con lágrimas en los ojos, afirmó: “yo solo pensaba que estaba protegiendo a mi familia”.
Pero Juan Ricardo Hernández Jr., hijo de la víctima, pidió que “se haga justicia y se le imponga la pena máxima. Yo estuve con mi padre la noche anterior, ahora ya no más“.
Por su lado, Mercedes Arce, pareja de la víctima, dijo que había tenido una relación de cuatro años con Hernández, a quien conoció en su lugar de trabajo, el aeropuerto de Miami.
“Nos íbamos a casar la semana en que ocurrió la tragedia. Se quedó todo preparado”, recordó. Desde entonces, agregó, su salud se ha deteriorado desde la muerte de su pareja, tiene que recibir tratamiento psicológico y psiquiátrico.
“Cuando tengo que salir al médico o algo, me da miedo salir a la calle”, acotó.
En su testimonio, Arce dijo saber que no fue su intención [de Lyle] matarlo, pero los actos tienen consecuencias. Espero que Dios nos de fuerza para soportar este dolor”.
Y terminó diciendo: “Pido que se le dé lo máximo”.