Europa es la región del mundo que recupera turistas más rápidamente. En el primer trimestre del año el llamado Viejo Continente multiplica casi por cuatro los números del mismo período de 2021, sobre todo por la demanda intrarregional, aunque un 43 % por debajo de los de 2019, antes de la pandemia.
En las Américas, las llegadas internacionales doblaron las del primeros meses de 2021, pero son un 46 % inferiores a las de 2019.
Según el último barómetro de la Organización Mundial de Turismo (OMT), la actividad turística internacional creció entre enero y marzo un 182 % (casi tres veces más) en comparación con esos mismos meses del año anterior.
Fueron 117 millones de llegadas, frente 41 millones del primer trimestre de 2021, pero todavía un 61 % inferior a los datos precovid.
Oriente Medio y África, con aumentos del 132 % y el 96 % sobre el enero-marzo de 2021, crecen también de forma vigorosa, pero aún en torno a un 60 % por debajo de los niveles prepandemia.
En el caso de Asia y el Pacífico, donde todavía muchos destinos permanecen cerrados al turismo extranjero, los aumentos en relación con 2021 son del 64 %, aunque quedan un 93 % por debajo de 2019.
Por subregiones, el Caribe y la Europa mediterránea muestran las tasas de crecimiento más elevadas, de forma que las entradas de turistas internacionales se sitúan en el 75 % de los volúmenes previos a la crisis sanitaria de la COVID-19, e incluso algunos destinos ya los superan.
Cuba registra un notable incremento de turistas internacionales en lo que va de 2022
A la vez, el Indicador de Confianza de la OMT ha vuelto a los niveles de 2019 por primera vez desde el inicio de la pandemia, debido a un mayor optimismo sobre la evolución del sector entre los expertos consultados en todo el mundo.
Estos advierten de una fuerte explosión de la demanda, sobre todo en los viajes dentro de Europa y en los movimientos entre Estados Unidos y Europa.
Por todo ello, la OMT ha revisado al alza sus previsiones de 2022 y calcula que las entradas de turistas internacionales quedarán entre el 55 y el 70 % de las de 2019.
Los datos finales dependerán de cómo evolucionen las restricciones de los viajes, la guerra de Ucrania, la aparición de posibles nuevas variantes del coronavirus y de las condiciones económicas globales, en particular de la inflación y los precios energéticos.
El barómetro de la OMT refleja también que los ingresos por exportaciones turísticas sumaron 713.000 millones de dólares (665.000 millones de euros) en 2021, un 4 % más que en 2020, pero un 61 % menos que en 2019.
El gasto medio por viaje creció de los 1.000 dólares (933 euros) en 2019 hasta los 1.400 dólares (1.306 euros) de 2021.