El gobierno italiano tomó ayer la medida más drástica hasta el momento en un afán por detener la rápida propagación del coronavirus: cerrar toda la región de Lombardía en el norte, incluido Milán, y más de una docena de otras provincias.
El anuncio se produjo después de que Italia experimentara su mayor aumento diario de enfermos desde que el brote estalló el mes pasado. El número de casos es ahora es 5,883. Casi la mitad están hospitalizados. Más de 230 personas han muerto.
Según el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, la medida prohíbe a cualquier persona a salir o ingresar a las zonas rojas identificadas excepto por “necesidades laborales imposibles de evitar o situaciones de emergencia” a partir del domingo y al menos hasta el 3 de abril.
Se aplica a unos diez millones de residentes de Lombardía y a otros seis millones en provincias de todo el país, incluidas Venecia, Parma y Módena.
Los residentes recibieron instrucciones de evitar reuniones públicas. Cines, teatros, escuelas de baile, salas de bingo y otros centros sociales también estarán cerrados. Los restaurantes podrán permanecer abiertos solo si pueden mantener una distancia de un metro entre los clientes.
La medida podría tener un impacto devastador sobre las empresas locales. Italia es la tercera economía más grande de la Unión Europea. Expertos y funcionarios de turismo proyectan 32 millones de visitantes extranjeros menos y una pérdida de 8.1 mil millones de dólares solo en el segundo trimestre de este año.
“Queremos proteger la salud de todos los ciudadanos”, dijo Conte. “Somos conscientes de que esto creará inquietud y que estas medidas serán un sacrificio […]. Pero este es el momento de ser responsables”.
En los Estados Unidos, 19 personas murieron por COVID-19, 16 en el estado de Washington, dos en Florida y una en California. En todo el país el número total de casos ha aumentado a 395. Se agregan más todos los días.
A nivel mundial, se ha informado de coronavirus en más de 80 países y se han enfermado a más de 100,000 personas. La mayoría de los casos en China continental, donde se originó el virus. Desde enero, más de 3.500 personas han muerto.
Toda Italia está en isolacion! Las personas solo pueden ir al trabajo o al médico, ¡todo lo demás está cerrado! ¡Hasta el 10 de abril!