El presidente de Francia Emmanuel Macron, convocó un debate nacional a través de una carta dirigida al pueblo francés, para resolver la crisis que atraviesa el país y que ha generado fuertes protestas sociales, organizadas por el movimiento conocido como “chalecos amarillos”.
Sin embargo, representantes de este movimiento y rivales políticos del mandatario aseguraron este lunes que la misiva no es suficiente para calmar la ira nacional provocada por sus políticas.
En su carta, Macron dice estar abordando las preocupaciones del movimiento a través de un “gran debate” que comenzará el martes con reuniones locales en todo el país. La discusión se centrará en los impuestos, los servicios públicos, el cambio climático y la democracia.
Lettre aux Françaishttps://t.co/GInvgaQrhe
— Emmanuel Macron (@EmmanuelMacron) January 13, 2019
Jeremy Clement, representante de los “chalecos amarillos”, dijo a la televisora BFM que la misiva “resuelve parte del problema”, pero que no va lo suficientemente lejos como para abordar la pérdida del poder adquisitivo.
Uno de los manifestantes, Jerome Rodrigues, comentó a la cadena CNews que Macron no reconoció “la urgencia” de las preocupaciones de los trabajadores con ingresos bajos y de los jubilados.
Otros criticaron al presidente por descartar la restauración de un impuesto a la riqueza en hogares de Francia con bienes por arriba de los 1,3 millones de euros (1,5 millones de dólares). Los legisladores de la oposición también criticaron la carta.
En ella, Macron dijo que no hay temas prohibidos y enlista más de 30 preguntas.
Indica que Francia debe expresar su opinión sobre qué impuestos deben reducirse, qué soluciones hay para reducir el impuesto a los viajes, la calefacción y los alimentos y si debe considerarse el voto obligatorio y una menor cantidad de legisladores.
También mencionó la posibilidad de introducir una cuota anual de inmigración, aclarando que no se aplicaría para el estatus de asilo.
“No abandonaremos las medidas que debemos tomar… para motivar la inversión y que el trabajo pague más”, enfatizó.
El líder francés dijo que el debate ayudará al gobierno a desarrollar políticas y colocar a Francia más arriba en el escenario europeo e internacional. No obstante, las críticas recibidas ponen en duda la efectividad de su convocatoria.
Las protestas de los “chalecos amarillos” comenzaron en noviembre pasado, en respuesta del alza de los impuestos promovida por Macron y que finalmente no se realizó. Desde entonces, han ganado en relevancia y aumentado sus demandas, que exigen en movilizaciones cada sábado.